Unos dicen que son la tercera fuerza en Mendoza, más allá del lugar en el que queden en la votación de octubre. Los otros cuestionan:
“¿Por qué el tercer lugar? Sin pausa, argumentan que “los votos no tienen dueño”.
Las declaraciones corresponden a los referentes del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), por un lado, y a los del Partido Intransigente (PI), por el otro; partidos que quedaron entre sí muy cerca en las PASO, con sólo 13.823 votos de diferencia, a favor de los primeros.
Si bien ambos partidos disputan para quedarse con los votos que no acaparen la UCR, con el Frente Cambiemos, y el PJ, con Somos Mendoza, en la campaña no se reconocen como rivales directos y evitan las confrontaciones con vistas al tercer lugar.
En el horizonte de las generales del 22 de octubre, está en juego una de las cinco bancas en el Congreso nacional, más conocida como “la quinta banca” y algunos espacios en la Legislatura que, sin duda, fortalecerían a cualquiera de los dos partidos.
En este punto, el FIT tiene el desafío renovar las bancas que pierde: una en el Congreso nacional, un senador y tres diputados provinciales y seis concejales.
Para esto, reconocen, tienen el desafío de lograr al menos 50 mil votos más (obtuvieron un poco más de 92 mil en las PASO) para llegar a los 140 mil que supieron alcanzar.
No obstante, no creen en el tercer puesto y dicen que el objetivo es retener la quinta banca en la Cámara de Diputados nacional. “Somos la tercera fuerza porque somos independientes de los partidos tradicionales. Va más allá de que quedemos cuartos o segundos, como pasó en Capital en 2014”, señaló Lautaro Giménez, jefe de campaña del FIT.
En este punto, recuerdan anteriores elecciones en las que asomaron partidos que de alguna manera pusieron en duda su continuidad. En 2015, fue el Frente Renovador el que quedó en ese tercer lugar en las elecciones de diputados nacionales, mientras que anteriormente era el PD el que hacía sombra, antes de que integrara el frente Cambia Mendoza.
“Si contamos desde 2013, ya hemos pasado por 12 elecciones, que son fotografías de un momento”, analizó Giménez y diferenció a su eventual rival, la lista que lleva a los candidatos que se hicieron conocidos por su participación en la ONG de defensa al consumidor Protectora.
“Cuando uno ve las listas, se encuentra con personas que han sido funcionarios, que han estado en el radicalismo y en el PD. De alguna manera, son parte de la política tradicional”, criticó el encargado de la campaña en el FIT.
Del otro lado, también hacen su interpretación. El candidato a diputado nacional, José Luis Ramón, no cree que esté disputándole el lugar al FIT, sino que va por todos. “Nosotros somos una nueva fuerza que se vino a instalar en el arco político. Pero si somos primeros, segundos o terceros, lo va a resolver el electorado”, señaló el abogado y apuntó a los otros partidos.
“Nadie es dueño de los votos. No es como nos quiere hacer creer el Gobernador (Alfredo Cornejo), que los votos son de ellos. En todo caso, que sean sus candidatos los que hagan las propuestas, no el Gobernador haciendo campaña por ellos. Pero que tampoco (Omar) Félix haga campaña copiándonos las propuestas”, criticó al radical y al justicialista por igual.
Por su parte, la consultora Reale Dalla Torre dio su explicación. Si bien todavía no hay encuestas como para hacer un análisis del electorado, sí se advierte un perfil entre los votantes.
“El electorado del PI, de acuerdo a estudios cualitativos, es menos afín al FIT, es mucho más blando y con un grado de simpatía por Cambiemos. En cambio, el del FIT es más opositor, difícilmente votaría a Cambiemos”, analizó Martha Reale, directora de la consultora.
Un apoyo inesperado de Félix a su rival, Ramón
El día después del cruce -mediático- entre el ministro de Gobierno, Dalmiro Garay, y el candidato del PI, José Luis Ramón, el que salió a opinar fue el candidato del frente peronista Somos Mendoza, Omar Félix, quien cuestionó la actitud oficialista y defendió al abogado de Protectora. El detalle es que, previamente, Ramón también había acusado al justicialista de “copiarle las propuestas”.
“Cornejo está tratando de sacar de pista a algunos”, entendió Félix y justificó por qué se molestó con el Gobernador: “Uno quiere que en política haya cada vez más participación. La gente del PI también son mis adversarios, pero actuar como censor o querer proscribir a alguien que quiere participar no me parece que sea lo correcto”, señaló.
La polémica en cuestión empezó con una frase de Garay, que hizo notar una ley que dispone que las organizaciones de consumidores no pueden participar de la actividad política. Ramón y Mario Vadillo, (candidato a diputado provincial), respondieron que ya renunciaron a la conducción de la ONG.
El episodio dio lugar a una ida y vuelta de mensajes, a la que ayer se sumó Félix. “Ellos buscan la polarización con nosotros, pero no estamos en esa posición”, acusó ayer Félix al oficialismo.
A la vez, el candidato y presidente del PJ minimizó la crítica que le hizo su defendido, Ramón, quien lo acusó de “copiarle” la propuesta contra el tarifazo.
“Ellos tienen una mirada desde los derechos de la defensa del consumidor; nosotros, desde la defensa de los que menos tienen. Por ahí puede suceder que tengamos una coincidencia en cosas que estamos planteando, pero nosotros lo hacemos desde las banderas del PJ, de la igualdad”, defendió Félix.
