Tres ascensos en tres años. Dos cortes de redes. Más de 200 chicos jugando en sus divisiones formativas. Sin dudas, hoy, el Atlético Club San Martín respira básquet. Lo siente. Un fenómeno que se expande día a día. Históricamente la institución del Este de la provincia, connota fútbol. Su ADN lo sostiene.
Sin embargo, como en esa disciplina que es “pasión de multitudes” está dormido, el básquet comenzó a ganarse un lugar en el corazón del hincha Chacarero. Un individuo pasional, que entiende mucho más de color albirrojo que de otra cosa. Por eso, cuando hay una camiseta del León en un campo de juego, el corazón palpita. Se enciende. Brota. Amor en su máxima expresión.
Atlético Club San Martín se acaba de consagrar campeón del Torneo Apertura Nivel 2 y de esta manera logró su ascenso al Nivel 1. Como si esto fuera poco, aún se disfruta el título Apertura de Superliga. El máximo logro de la institución Chacarera en el básquetbol local.
Pero, este título conseguido por los chicos del club provocó una verdadera locura. Así lo sostiene, Pablo Ferlaza, presidente de la comisión de básquetbol: “Es un sueño lo que estamos viviendo en este momento.Pero, un sueño que construimos todos juntos en el club. Este título de Nivel 2 tiene un valor agregado para nosotros, porque se logró con chicos del club. Jugadores que no están en Superliga y que serán nuestro futuro. Por eso vale mucho, por eso se festeja tanto. Hay un proyecto deportivo atrás de todo este resultado”.
En el año 2015, la primera división lograba el ansiado ascenso al Nivel I, por aquel entonces, A2. Un año más tarde, las divisiones formativas del León lograron el ascenso de la zona B al grupo A.
Es decir, que sus chicos comenzaron a competir de igual a igual con clubes como Anzorena, Regatas, Talleres, Murialdo, Atenas y Obras, máximos exponentes en la actualidad en materia de inferiores.
En el 2017, con la llegada de dos jugadores norteamericanos, San Martín rompió el mercado de pases y logró el salto a la máxima categoría. Finales inolvidables con Murialdo. Juegos de otra categoría y a salas llenas.
La red la cortó el Canario, pero, San Martín dejó su huella. Y en el 2018, el León tocó el cielo con las manos, tras el título en el Apertura de Superliga, logró el campeonato del Nivel I al barrer la serie final ante el Club Cano. Sin dudas, un fenómeno que parece no tener techo, límite.
Al respecto, Ferlaza, comentó: “El primer loco soñador de todo esto fue Daniel Hidalgo, quien sentó las bases para lograr que el básquet cambiara su mentalidad. Somos un equipo de trabajo que entendimos que más allá de mejorar nuestro rendimiento deportivo, tenemos que acercarle este producto a la gente. Tocar el corazón del hincha de San Martín que es muy pasional. A través de un departamento de prensa trabajamos las redes sociales. Comenzamos a informar todas nuestras actividades. Desde la colocación de una tribuna, hasta un tablero nuevo. Todo se hizo a pulmón y todo se vio reflejado. Había gente que no sabía que en San Martín se jugaba al básquet. Luego, se fueron identificando y eso fue uno de nuestros mayores logros. Hoy, la gente acompaña y hemos provocado una revolución”.
Sobre la evolución de las divisiones formativas, el presidente de la comisión de básquet, explicó: “Amo el minibasquet. Me encanta ver a los chicos jugar. Creo, que hoy, he visto más partidos de mini que de Superliga. El futuro de los clubes está en los niños. Pero, el desafío nuestro es armar un equipo de primera división competitivo que contagie a todos los chicos. En el club tenemos un profesor que es Sebastián Bruno, lleva 16 años en el club. Es un padre. Un maestro. Desde que lo convencimos para que estuviera en Mosquito, no paran de sumarse chicos. Hoy, sólo mosquito, tenemos 35 jugadores. Cerca de 220 chicos juegan con la camiseta de San Martín. Se genera un sentimiento de pertenencia único. Y esta demanda, te lleva a ser más profesional. Nuestros chicos pasaron de entrenar dos o tres horas por semana, a practicar dos o tres horas por día. Hay trabajo de gimnasio, trabajo técnico, lanzamientos y luego el entrenamiento general en cancha. A la larga, estos detalles te brindan resultados positivos”. Como plus, Atlético Club San Martín tuvo la iniciativa de “apadrinar” el básquet recreativo de la Municipalidad de San Martín. Aquellos chicos que jugaban hasta mini en el Poli, luego dejaban o muchos se iban al club Chacarero a jugar, pero no podían pagar la cuota, por ende, muchos se alejaban. ¿Qué hizo ACSM?, inscribió a los mini de la Municipalidad en la Federación como Atlético Club San Martín B. Entonces, cuando a los 13 años, esos chicos ya no pueden seguir en el Poli, se suman directamente a la inferiores del club y se les respeta la cuota social. Una idea brillante que le permite sumar casi 20 niños por categoría.
Por último, Pablo Ferlaza, explicó cuáles son los próximos desafíos del León de cara al 2018: “Queremos ganar la Superliga a nivel primera y queremos afianzar nuestros juveniles en el Nivel I. Hoy, podemos disfrutar resultados positivos. Pero, los títulos comenzaron a ganarse desde hace varios años, cuando cambiamos la mentalidad de todo el básquet de la institución”.