La generación dorada española puso fin a un ciclo triunfal en el mítico estadio de Maracaná con su derrota ante Chile (2-0), cinco días después de haber sido humillada por Holanda (5-1), en Brasil-2014, tras más de un lustro como referente del fútbol mundial.
La generación liderada por Iker Casillas y Xavi Hernández, que empezaron dando éxitos a la Roja, formando parte del equipo que ganó el Mundial Sub 20 de Nigeria’99, dará paso después de Brasil 2014 a una nueva generación exitosa, que pide paso, liderada por Thiago Alcántara, centrocampista del Bayern Munich, que ganó las dos últimas Eurocopa Sub 21, en 2011 y 2013.
Xavi Hernández e Iker Casillas, así como David Villa y Xabi Alonso, entre otros estarían disputando su último torneo importante y probablemente dejarán la selección tras este Mundial.
El relevo está preparado con los jóvenes campeones europeos con nombres como Thiago Alcántara, Isco, Dani Carvajal, Cristian Tello, Jorge Resurrección 'Koke', David de Gea, Álvaro Morata o Juan Mata, pero esta generación se despidió de una forma sonrojante, cayendo en la primera fase tras solo dos fechas.
David Villa, ya ha fichado por el New York City, y Xavi Hernández, al que la prensa española coloca en un club catarí, desaparecerían del plano internacional, y quedarían hombres como Andrés Iniesta o Sergio Ramos como nexos para el relevo generacional.
Del Bosque, tras la tristeza de la eliminación, quiso rendir homenaje a estos hombres que han dado tantos triunfos a su país.
“Ahora me pararía a pensar en lo que nos han dado estos jugadores y que tenemos una federación bien consolidada, que no está en descomposición. Tendremos tiempo para buscar lo mejor para el fútbol español, y eso me incluye a mí”, dijo cuando se le preguntó sobre el final internacional de varios jugadores.
El Mundial de Brasil 2014 mostró a un equipo cansado físicamente, falto de ideas y humillado. Recibió siete goles en dos partidos y solo marcó uno, de penal.
En ambos partidos mostró gran fragilidad psicológica, incapaz de reaccionar ante los goles que les iban cayendo.
“El fútbol va pasando momentos. Esta generación de España se ha bañado de muchas capacidades reconocidas que le permitieron ser el mejor del mundo.
Esta generación no tuvo la oportunidad de continuar con el éxito, que no es duradero, no es continuo. España tendrá que analizar el futuro, pero con la estructura que tienen saldrán adelante muy pronto”, dijo el seleccionador de Chile, el argentino Jorge Sampaoli.
En el primer partido, contra Holanda, se lanzó con corazón, en lugar de cabeza, en una actitud impropia de jugadores de la experiencia de los españoles. Esas facilidades las aprovechó al máximo Holanda, especialista en contragolpes y en sacar ventaja cuando le dejan espacios y fue colocando uno a uno cinco tantos.
Algo parecido ocurrió en el segundo partido. Desde el primer minuto, se mostró entregado, como superado por la presión. La ausencia de Xavi Hernández contra Chile, era el primer síntoma de la caducidad de esta generación. Del Bosque lo dejó en el banco.
Ahí comenzó el fin de esta generación española que tuvo un mal final tras todo lo que había conseguido.
¡Tiembla Sabella!,
“Al único equipo que no quiero enfrentar es a Chile", dijo Alejandro Sabella hace una semana y fue sorpresa para todos.
El fútbol de selecciones se basa en pequeñas sociedades y se sustenta en generaciones únicas y, muchas veces, irrepetibles. Chile está en ese momento en el que o se da el gran paso o se fracasa estrepitosamente. Aquella revolución que nació con Salas y Zamorano fue el espejo en el que se miraron estos chicos que hoy brilla en Europa, estamos hablando de Alexis Sánchez, Arturo Vidal, Claudio Bravo, Jan Beausejour y Eduardo Vargas.
Tallados con cinceles argentinos (Marcelo Bielsa, Claudio Borghi y Jorge Sampaoli, fueron sus últimos técnicos), estos muchachos escribieron ayer la página más gloriosa de su historia, porque si bien sólo dieron un paso hacia los octavos de final, lo hicieron dejando en el camino a España (último campeón del Mundo), al que mandaron de vuelta a casa y justo en el momento en el que se lo criticaba por arrugar en las paradas bravas.
Sus armas son las típicas de la escuela rosarina: presión arriba y mucho estudio táctico de los rivales. Dicen que Sampaoli vio 1.000 videos antes de jugarle a una España plagada de viejos.
Y para aquellos que tanto critican a Sabella, los trasandinos pusieron una línea de cinco defensores que no le quita la posibilidad de ser temibles en el área de enfrente y armar un golazo como fue el de Vargas.
El objetivo será ahora superar el tercer puesto que consiguieron en el Mundial que organizaron en el '62, para muchos puede ser una vara muy alta, pero nadie lo daba como candidato en la zona de la muerte y casi no ha sufrido para conseguirlo. Maxi Salgado
Se terminó la maldición
La Bobe me decía cuando pequeño, que no hay mal que dure cien años y la viejecilla, que había sufrido mucho en la época de la segunda guerra, tenía razón. Ayer después de 64 años, por fin Chile le ganó a España y en el mismo escenario y por el mismo marcador, que los europeos habían batido a los sudamericanos por la Copa del Mundo del ‘50, la del Maracanazo.
Otro triste récord, para la Roja chilena, también quedó conjurado para toda la vida, se cumplieron este 18 de junio 25 años, del denominado Maracanazo, el seleccionado chileno, en esos mismos pastos, avergonzaba al mundo, luego que su arquero Roberto “Condor” Rojas, fingiera un corte en su rostro por una esquirla de una bengala, cuando el mismo se había cortado con un bisturí, que trajo desde el vestuario dentro de uno de sus guantes.
Como decía ayer la prensa trasandina, se acabó la la maldición del Maracaná, porque por primera vez Chile derrotó a España y porque con una actuación épica y de paso, se borraba de la retina de los más grandes el sinsabor de aquella triste historia, que dejó a Chile de los Mundiales de Italia y Estados Unidos
Chile, por momentos, se olvidó de sus eternos problemas de pánico escenico y le jugó de igual a igual y por momentos superó al último campeón.
Los “formados” por Jorge Sampaoli en la U de Chile, sus pollos: Eduardo Vargas y Charles Aranguiz, fueron, los que llevaron a la Roja, la de esta parte del mundo, a una segunda etapa, que seguramente tendra como futuro rival a Brasil. Lo importante, es que el entrenador santafesino, supo manejar muy bien el grupo, que venía de una epoca casi dorada con Marcelo Bielsa, supo mantener el nivel y mejorar muchos aspectos y retocar otros puntos, donde este equipo siempre tuvo deficiencias como en el arco y entre sus defensas centrales.
Chile jugó su final, y la ganó, ahora se viene el todo poderoso Holanda. En los papeles, el equipo de Don Sampa, como le dicen al DT argentino, en Chile, la tiene muy complicada, pero con dos victorias al hilo, cualquier equipo llega encumbrado. Lo ideal sería que no cayera justo en el momento final, cuando enfrente tenga a los herederos de la Naranja Mécanica de Cruyff. Gonzalo Tapia