Vitali Mutko, vicepresidente del gobierno de Vladimir Putin, renunció temporalmente a la presidencia de la Federación de Fútbol de Rusia (RFS) tras el escándalo de doping que sacudió al país en los últimos tiempos.
Así lo indicaron medios de prensa rusos en base a fuentes de la federación de fútbol local, consignó la agencia DPA.
El vicepresidente del gobierno de Vladimir Putin dejará el sillón de mando de la federación de fútbol durante seis meses, pero mantendrá su cargo de jefe del comité organizador del Mundial Rusia 2018, que se disputará del 14 de junio al 15 de julio.
El Comité Olímpico Internacional (COI) suspendió recientemente a Mutko, quie no podrá asistir nunca más a unos Juegos Olímpicos por su presunta participación en la trama de doping de Estado en el deporte ruso.
Mutko, de 59 años, era ministro de Deportes en 2014, cuando se celebraron en el sur de Rusia los Juegos de Invierno de Sochi, en los cuales -según una investigación del COI- hubo una manipulación de los controles antidoping con ayuda estatal. Durante los seis meses en los que Mutko dejará la presidencia de la Federación rusa de fútbol, el secretario general Alexander Alayev será el encargado de asumir la presidencia de la entidad.