El ensayo nuclear anunciado hoy por el Gobierno de Corea del Norte y calificado por sus autoridades como "exitoso", desató una catarata de reacciones en varias capitales del mundo, que lo calificaron como un nuevo desafío al orden internacional.
Poco después del anuncio, el gobierno estadounidense condenó el hecho y prometió una "respuesta apropiada", según dijo el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, quien subrayó que su país continuará "protegiendo y defendiendo a nuestros aliados en la región, incluida la República de Corea del Sur".
También el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, condenó "enérgicamente" el nuevo test nuclear norcoreano, y aseguró que su país dará una "firme respuesta" ante lo que considera una "grave amenaza" para su seguridad que no va a "tolerar de ninguna manera".
Washington y Tokio solicitaron una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para imponer más sanciones a Pyongyang, que finalmente se confirmó para hoy a las 13 horas de Argentina, según fuentes de ese organismo.
China, en tanto, rechazó con firmeza la prueba y pidió al gobierno de Pyongyang que "mantenga su compromiso con la desnuclearización de la península coreana".
La portavoz de la cancillería, Hua Chunying, anunció que Beijing llamará a consultas a un representante norcoreano, sin detallar si sería el embajador y leyó una declaración en la que, además de expresar el rotundo rechazo de su Gobierno, aseguró que "China no sabía nada" con antelación al ensayo.
El Gobierno alemán se sumó también a la ola de reclamos y condenó el hecho "de la manera más enfática" según un comunicado de la Cancillería y citó al embajador de ese país, según informó la agencia de noticias EFE.
"Según lo que sabemos hasta el momento, tenemos que partir de la base de que anoche Corea del Norte ha vuelto a realizar un test atómico.
En caso de que eso se confirme, lo condenamos" manifestó el canciller, Frank Walter Steinmeier, quien subrayó que el programa atómico de Pyongyang representa una amenaza para la paz y la estabilidad de la región.
"Con la nueva violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, Corea del Norte atenta contra los principios de la comunidad internacional y pone en peligro la seguridad regional e internacional", señaló el ministro.
El canciller italiano, Paolo Gentiloni, sumó la condena de su país al rechazar lo que calificó como "supuesta prueba nuclear" realizada por Corea del Norte, que tachó de "provocación" que requiere "necesarias reacciones por parte de la comunidad internacional".
"De confirmarse, la prueba nuclear realizada esta mañana por Corea del Norte representa una grave violación del derecho internacional y de las pertinentes resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas", dijo Gentiloni en un comunicado.
Asimismo calificó este hecho de "seria amenaza a la paz y a la seguridad internacional y regional".
Gentiloni mantendrá una conversación con su homólogo japonés, Fumio Kishida, cuyo país lidera actualmente el G7, para "discutir sobre las necesarias reacciones de la comunidad internacional a esta provocación".
En tanto que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que el ensayo nuclear "socava la seguridad regional e internacional", e instó a Pyongyang a respetar plenamente sus obligaciones internacionales y a abandonar sus programas de armas nucleares y de misiles balísticos.
"El ensayo de arma nuclear es una clara violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU", señaló también el máximo responsable de la Alianza Atlántica en un comunicado.
Stoltenberg condenó "el desarrollo continuado" por parte de Corea del Norte de programas de armas nucleares y de misiles balísticos, y su "retórica inflamatoria y amenazante".
La India también reclamó hoy a Corea del Norte que se abstenga de realizar pruebas nucleares, que a juicio de Nueva Delhi "ponen en riesgo la estabilidad en la región".
"Pedimos a la República Popular Democrática de Corea que se abstenga de tales acciones, que impactan adversamente en la paz y la estabilidad de la región", dijo el portavoz de la cancillería india, Vikas Swarup, en un comunicado.
La India mantiene desde hace años una carrera armamentística con su vecino Pakistán, que también posee armas nucleares y es su principal rival en el subcontinente indio, aunque el mando militar indio no pierde de vista a la también vecina China, otra potencia nuclear.