Una camioneta abandonada en la playa de un hotel de Ciudad mantiene intrigada a la Justicia. Se trata de una Great Wall (de origen chino) que, según se pudo averiguar, fue abandonada por una familia peruana desde el 7 de octubre pasado.
"El vehículo fue dejado en una playa de estacionamiento. Después de algunos días, vinieron del hotel donde la abandonaron para poner la denuncia", dijeron desde la Oficina Fiscal 1.
Comenzadas las pesquisas, salió a la luz que la camioneta está a nombre de Hernán Basilio Lozano (49), un ex jefe de la policía de Perú que llegó a Mendoza con su esposa, Marlene Rodríguez (50); su hija, Shirley Lozano (29), y la hija de ésta, una menor de edad. Todos se alojaron en el hotel Mod de calle Federico Moreno al 2100 de Ciudad el 7 de octubre.
De acuerdo con la denuncia, los Lozano hicieron el check-out el 9 pero pidieron dejar la camioneta en la playa "un par de días más".
El tema es que nunca volvieron a buscarla. Y desde el hotel comenzaron a preocuparse. Además, los Lozano debían pagar por día y la tarjeta de crédito que dejaron comenzó a ser sistemáticamente rechazada.
A partir de una orden judicial, la camioneta fue llevada a la seccional 3 para registrarla y en su interior los policías hallaron dos proyectiles de una 9 milímetros. Para llevar a cabo esa medida, se decidió que la calle Rioja entre Lavalle y Catamarca fuera cerrada.
Lo único extraño que se halló en el vehículo tuvo que ver con los proyectiles, "ya que se encontró ropa y pertenencias de quienes serían los dueños de la camioneta", indicó una fuente policial.
Más dudas
De acuerdo con la información aportada por Migraciones, la familia peruana después de dejar el hotel se fue del país. No todos tuvieron el mismo destino.
"El menor de edad -indicaron de esa repartición- tiene nacionalidad argentina; los tres mayores restantes son peruanos y no registran medidas pendientes con la justicia", indicó una fuente. "Y dejar tirada una camioneta no constituye delito", completó la fuente.
El caso fue tomado inicialmente por el fiscal correccional Lauro Monticone. Ese fiscal fue quien ordenó la requisa de la Great Wall. De momento, el hecho no registra delito alguno. Este diario intentó comunicarse con el magistrado pero no hubo respuesta.
Entretanto, la camioneta -que es muy vistosa- "descansa" en la calle Rioja, cerca de la Seccional 3, abandonada a su suerte.