El récord de asistencia a un partido del Mundial de rugby se batió este domingo con el duelo entre Nueva Zelanda y Argentina (victoria de los primeros 26-16) en el estadio londinense de Wembley, donde estaban presentes 89.019 espectadores.
El anterior récord se remontaba a la final del Mundial de 2003, gananda por Inglaterra ante Australia (20-17 después de prolongación) delante de 82.957 espectadores en el Telstra Stadium de Sídney.
Stephen Brown, uno de los responsables de la organización del Mundial-2015, celebró este récord. "Estamos encantados con esta fantástica afluencia en el estadio de Wembley esta tarde, consiguiendo un récord para un partido del Mundial, con más de 89.000 espectadores disfrutando del Nueva Zelanda-Argentina", afirmó.
Nueva Zelanda, defensor del título, y Argentina son los dos grandes favoritos del grupo C de la primera fase del Mundial de Inglaterra-2015, que completan Tonga, Georgia y Namibia.