No hubo baile en el arranque del programa de Susana Giménez de este miércoles. La diva apareció sentada frente a cámaras y dijo: “No quería empezar el programa cantando y bailando.
Hoy es un día en que los artistas, en especial los allegados a la China, estamos apagados. Aunque yo no puedo decir que esté triste, porque China tuvo una vida excepcional”.
Visiblemente conmovida, Susana siguió: “Jamás se va a repetir una personalidad como la de ella, con esas ganas de vivir, ese humor... Con esa locura maravillosa, entre señora paqueta y hippie... Todos la adoramos”.
“Fue parte de mi familia”, siguió Su, y contó cómo se conocieron, cómo trabajaron juntas y cómo nació una amistad que les duró toda la vida.
“Trabajé con ella en ‘Las mariposas son libres’, que fue su primer trabajo en la Argentina, porque Ana María Campoy se había ido a trabajar a México.
Desde entonces, China fue parte de mi familia. Compartimos las giras de la obra y nos reuníamos siempre en mi casa. Nosotros éramos jóvenes, teníamos veintipico de años y la escuchábamos contar y contar. Después, ella decía que tenía que irse.
La seguíamos hasta el ascensor y le pedíamos que siguiera contando. Un cuento más, China, uno más, y después, te vas, le insistíamos”.
“China emebellecía lo que le pasaba”, definió Susana, en alusión a la capacidad de la actriz para fascinar con las anécdotas de su vida cotidiana. “Fue una gran actriz y una mujer de una cultura excepcional”, agregó la conductora.
Luego, Susana Giménez evocó la última conversación que tuvo con China Zorrilla. “La llamé hace dos meses y me dijo que estaba bien. Pero de pronto, salía con cosas como: ‘No me llames a esta hora porque tengo ensayo’...”, recordó.
A continuación, invitó a los televidentes a compartir un video que compilaba todos los momentos en que Zorrilla visitó el programa de Susana, ya fuera para participar de algún sketch o para sentarse en el living para someterse a una entrevista.
Al finalizar el video, la conductora concluyó: “La quise con toda el alma” y propuso un fuerte aplauso para despedirla que resonó en el estudio. “¡Te quiero China! Nos veremos en otro planeta, en otro mundo, pero nos volveremos a encontrar. Gracias por haber existido en mi vida”, cerró Susana.
