Agustín Canapino se consagró campeón tras el cuarto puesto en Neuquén y festejó su cuarto título en el Turismo Carrretera, el tercero de forma consecutiva.
Arrecifes vivió una fiesta en la noche del domingo y la gente se volcó a las calles para recibir a su campeón Agustín Canapino y mezclado entre la multitud estaba Marcos Di Palma, quien no dudó en poner al último hijo pródigo de la ciudad por encima de todas las grandes glorias del automovilismo argentino.
“Agustín es el más grande de la historia”, sentenció. Y argumentó: “Ahora el automovilismo es mucho más competitivo. Los Emiliozzi, Traverso y mi viejo le sacaban un segundo al décimo, en cambio ahora es todo mucho más parejo… a la milésima”.
El menor de los hijos del legendario Luis Di Palma volvió a inflar el pecho al hablar de la Cuna de Campeones: “Es un orgullo que Agustín sea arrecifeño”. Y sacó de su repertorio frases con su sello particular: “No lo tendrían que pasear en autobomba, lo tendrían que llevar en un OVNI porque es de otro planeta”.
Frente al micrófono de Carburando le puso pimienta en su última definición para enaltecer al reciente tricampeón del Turismo Carretera: “A Ortelli lo va a superar en poco tiempo. Imaginate que éste (por Canapino) está en contra y el otro (por Ortelli) está a favor (de la ACTC)… Ni al padre le dejan entrar (por la sanción a Alberto Canapino) y les gana igual”.