El solicitante de asilo sirio que se hizo explotar cerca de un festival de música pop el domingo en el sur de Alemania, había jurado “lealtad” al Estado Islámico (EI), el segundo atentado reivindicado por el grupo yihadista en el país en una semana.
El EI afirmó que el autor del atentado en Ansbach era uno de sus “soldados”, según la agencia Amaq, un órgano de propaganda de la organización extremista.
Las pruebas de su obediencia al EI fueron encontradas en un video grabado en su teléfono móvil. El sirio “anunció explícitamente” que actuaba “en nombre de Alá”, y que “había jurado lealtad (al jefe del EI), Abu Bakr al Bagdadi”, declaró Joachim Hermann, ministro del Interior de Baviera.
Asimismo “advirtió expresamente una venganza contra los alemanes que se atraviesan en el camino del Islam”, añadió el funcionario.
La fiscalía federal alemana, competente en materia de terrorismo, anunció que tomó a su cargo la investigación y confirmó las sospechas sobre “la motivación islamista de Mohammad D”, quien transportaba explosivos en su mochila antes de hacerse estallar y herir a 15 personas, indicó en un comunicado.
El pasado 18 de julio, un solicitante de asilo afgano (probablemente paquistaní, según la policía) de 17 años hirió con un hacha a cinco personas en un tren regional en Wurtzburgo, lo que también reivindicó en nombre del EI.
Ayer temprano, el ministro del Interior alemán Thomas de Maizière, en una entrevista al grupo de prensa Funke, dijo que “no debemos sospechar de los refugiados en forma generalizada aunque haya procedimientos en curso en casos aislados”.
La portavoz adjunta del gobierno alemán, Ulrike Demmer, señaló ante la prensa que el riesgo criminal que representan los refugiados en el país no es proporcionalmente “más importante que en lo concerniente al resto de la población”. El gobierno busca así evitar la “sospecha generalizada” hacia los refugiados.
Pero, el temor es grande para el gobierno de la canciller Angela Merkel al ver la aprehensión de buena parte de la población ante los inmigrantes, que llegaron en número récord el año pasado. Además, en los últimos acontecimientos estuvieron implicados solicitantes de asilo.
"Un atentado suicida"
Al principio hubo cierta confusión sobre el atentado de Ansbach, en Baviera (sur).
El solicitante de asilo sirio, por carecer de entrada no logró acceder al recinto donde tenía lugar el festival de música pop al aire libre con 2.500 participantes, por lo que se hizo explotar en las cercanías provocando 15 heridos, cuatro de ellos de gravedad, aunque ninguno en peligro de muerte.
Además, se estableció que el autor del atentado, cuya solicitud de asilo fue rechazada hace un año, debía ser expulsado hacia Bulgaria.
“Si hubiera logrado entrar al recinto, seguramente habría más víctimas”, destacó un responsable de la policía local.