En medio del partido que jugaban Rosario Central y Tigre, se vivió una escena más de violencia en el fútbol argentino. Una más y van... Desde la tribuna local le arrojaron un proyectil al DT del Matador Gustavo Alfaro, quien terminó cortado en su cabeza.
"Por un idiota no vamos a parar el partido", dijo el entrenador una vez que fue atendido por el corte que le produjo el impacto.
Ahora habrá que esperar la decisión sobre el estadio de Central, ya que en estas situaciones generalmente se suele prohibir la presencia del público durante algunos partidos.