El dólar cerró ayer por primera vez sobre los $ 40 y obligó al Banco Central (BCRA) que preside Luis Caputo a reaparecer sorpresivamente y a sacrificar reservas para evitar que la divisa replique esa performance en el mercado mayorista.
La moneda estadounidense profundizó su carrera alcista en el último tramo de la sesión y terminó con un salto diario de $ 1,14 (2,91%) en las pantallas minoristas, cerrando a $ 38,43 para la compra y a $ 40,24 para la venta.
Se trató de la cuarta jornada consecutiva de subas, con las que se alejó de las alentadoras bajas que registró al término de la semana pasada, incluso sin intervención del Banco Central. Ahora, desde el lunes, el dólar arrastra una ganancia de $ 2,41.
Presión a la suba
“La insuficiencia de la oferta impulsó la suba del dólar más importante de la semana que lo hizo terminar en el nivel más alto desde la salida de la convertibilidad”, planteó el operador de cambio Gustavo Quintana al analizar la situación en la plaza mayorista.
En el ámbito de los grandes jugadores, bancos y empresas, el billete llegó hasta los $ 39,9 para la venta, luego de avanzar $ 1,7 desde el cierre previo. El fuerte incremento y la ausencia de oferentes forzaron al Central a intervenir en el último tramo de la rueda para evitar que la moneda sobrepasara los $ 40.
La autoridad monetaria apareció con ventas directas cuando el dólar tocó los $ 39,75 y puso U$S 39 millones sobre la mesa. “El BCRA dejó correr innecesariamente al dólar y recién intervino cuando llegó a $ 1,50 de devaluación”, indicaron desde ABC Mercado de Cambios.
El volumen negociado fue de U$S 440.539 millones en el segmento de contado y de apenas U$S 2 millones en el mercado de futuros.
En tanto, las reservas internacionales finalizaron en U$S 50.529 millones, disminuyendo U$S 88 millones respecto al día hábil anterior.
Según los analistas, la escalada responde principalmente a que la oferta no alcanza a cubrir las compras de grandes inversores, entre los que figuran quienes buscan reacomodar posiciones tras abandonar las Letes (Letras del Tesoro) y quienes buscan cobertura antes del vencimiento de las Lebac (Letras del Banco Central) previsto para el próximo martes.
Y nuevamente el mercado cambiario local se movió a contramano de lo que sucedió en el exterior, donde el dólar retrocedió con fuerza y tocó su nivel más bajo en casi un mes.
El nuevo salto del dólar se enmarcó en una jornada de volatilidad que afectó a todas las variables financieras: la Bolsa porteña ganó 1% y cerró por arriba de los 30.000 puntos, mientras que las acciones de las empresas argentinas en los Estados Unidas se movieron con altibajos.
Incertidumbre
Parte del desconcierto que reinó se le atribuye a las declaraciones de Larry Kudlow, uno de los asesores del presidente Donald Trump, quien deslizó que existían negociaciones entre el Tesoro y la administración de Cambiemos para que la Argentina vuelva a la convertibilidad.
Sus declaraciones inmediatamente comenzaron a circular y tomaron la suficiente relevancia para que tengan que salir a desmentirlas desde el Ministerio de Hacienda que conduce Nicolás Dujovne.
Por otra parte, los ojos de los inversores que juegan en el mercado local continúan centrados en las discusiones entre el Gobierno nacional y el equipo técnico del FMI, que llegó el miércoles al país, para acelerar las negociaciones tendientes a liberar los dólares necesarios para que la Argentina blinde el frente financiero hasta finales de 2019.
Lo que ocurra en las negociaciones de los próximos días será clave para saber cómo evolucionará el tipo de cambio en el futuro.
Suba de más de 100% en ocho meses
El 8 de febrero pasado era noticia que el dólar superaba por primera vez la barrera de $ 20. Sin embargo, nadie esperaba que 8 meses más tarde el precio pasara la barrera de los $ 40 en los bancos del país. Desde ese momento hasta hoy, el tipo de cambio aumentó 103%.
Si se analiza el incremento del dólar desde el primer día del año hasta hoy, se observa un aumento del 114% en la cotización de la moneda norteamericana. Esa variación benefició a exportadores, pero aceleró la inflación interna.