La extrema susceptibilidad que determina las negociaciones en la plaza cambiaria argentina volvió a quedar en evidencia ayer, cuando el dólar se sacudió al compás de los movimientos en los mercados internacionales, y el futuro inmediato dependerá de los resultados de las elecciones primarias.
La sesión de ayer se caracterizó por la dolarización de las carteras. Así, los inversores manifestaron su insatisfacción ante la decisión que tomó la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) de bajar un cuarto de punto sus tasas de interés, que quedaron en el rango del 2 y el 2,25% anual.
Por el contagio, en la Argentina el billete verde avanzó otros 53 centavos en casas de cambio y bancos, y terminó a $ 43,30 para la compra y a $ 45,54 para la venta. Pero por momentos, la avanzada pareció mayor: la ola compradora se hizo presente desde el inicio de la sesión y cerca del mediodía la divisa norteamericana amagó con superar, en algunas entidades, la barrera de los $ 46, por primera vez en casi dos meses.
En el sector mayorista, el incremento fue de 48 centavos pero estuvo contenido parcialmente por los extremos esfuerzos del Banco Central: se repitió la fórmula de intervenir en los mercados de futuro y de habilitar otro aumento en las tasas de referencia que se ofrecen con las Letras de Liquidez (Leliq) en pesos y a siete días.
Fue la novena suba consecutiva de esos papeles. La autoridad monetaria aceptó elevar 0.248 puntos porcentuales el rendimiento promedio, que quedó en el 60,648%, su máximo nivel desde el 3 de julio.
"Creo que fue una intervención para suavizar un poco la corrección, porque en un mundo donde el dólar se está fortaleciendo mucho en un solo día, acá no puede bajar", evaluó el operador de cambios Gustavo Quintana.
El accionar oficial permitió que el dólar mayorista amortigüe el contagio y que finalice a $ 44,36 en el Mercado Abierto Electrónico (MAE), donde compran y venden los bancos y grandes empresas.
“Tenemos que acostumbrarnos a una volatilidad importante, que en algunos casos tiene que ver con factores externos y en otros, como ayer, con la suba del dólar en el mundo.
Por supuesto, también está la proximidad de las PASO y todo eso genera una presión sobre la moneda", planteó Quintana.
El dólar sigue siendo una amenaza, pero no ya por la falta de las divisas del campo sino por la incapacidad de los principales candidatos para despejar las dudas sobre el futuro de la economía y de la política monetaria pasadas las elecciones.
En ese contexto tomaron relevancia las recientes declaraciones del precandidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, quien adelantó que, si gana, recortará la tasa de las Leliq y promoverá un dólar más alto. "Eso pinta un panorama más complicado y se traduce en una mayor demanda de divisas", acotó Quintana.
De cualquier manera, la cotización del billete verde aún permanece dentro de los parámetros previstos en la estrategia que puso en marcha el Central para evitar otra debacle cambiaria como la del año pasado. Los números indican que ni siquiera se acerca al centro de la franja de referencia cambiaria que diseña el Central y que ayer se ubicó entre los $ 39,75 y los $ 51,44.
"La gran incógnita es el desenlace de las elecciones y qué va a pasar el año que viene, porque tiene que aparecer un programa económico, una política exportadora seria, y un sendero fiscal en el que se aclare cómo se va a lograr el equilibrio sin contar con los derechos a las exportaciones que permita prever que el fin de la lucha entre el dólar y las tasas", manifestó a este medio una fuente del sector industrial.
El anuncio de Trump que agravó la sangría
La de ayer no sólo fue una jornada difícil para el dólar en la plaza local sino para todos los activos argentinos, que no escaparon a la sangría que se produjo en el sistema financiero por la decisión de Donald Trump de aplicar nuevos aranceles a China.
En línea con los mercados de referencia, el índice Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cayó 1,6%. Además, las acciones de las empresas argentinas que cotizan en Wall Street llegaron a desplomarse 5,8% (Banco Macro).
En tanto, el Riesgo País de la Argentina saltó 4,3% y culminó en 818 puntos básicos.