La moneda local se devaluó hoy 26,56 por ciento a 13,38 pesos para la venta en el segmento mayorista, tras la liberación del cepo cambiario, en una rueda sin intervención del Banco Central y con escasas operaciones, mientras en casas de cambio se ofreció a 13,95 pesos y en el segmento paralelo, a 14,40.
"Las dificultades operativas derivadas de la implementación de la normativa puesta en vigencia hoy quitaron volumen y profundidad al mercado y permiten afirmar que el nivel del dólar exhibido en la fecha puede cambiar en la medida que se normalice la operativa y la plaza local muestre una actividad más acorde con el resto de los mercados de monedas", mencionó una fuente del mercado.
Fuentes del mercado señalaron que las adecuaciones de los sistemas operativos disminuyó la fuerza de la demanda, tanto en el segmento mayorista como en bancos y casas de cambio, lo que derivó en un escaso volumen de negocios.
Las adecuaciones de los sistemas operativos disminuyó la fuerza de la demanda.
Fuentes de la autoridad monetaria mencionaron que la entidad no intervino en el mercado de contado (spot), donde los negocios fueron de sólo 129 millones de dólares.
"El Banco Central de la República Argentina informa que durante el primer día de la liberación del mercado cambiario la cotización de cierre del dólar mayorista fue de $13,25 para el tipo comprador y $13,38 para el tipo vendedor", precisó en un comunicado la autoridad monetaria.
Y agregó que "no tuvo intervención en el mercado, que cerró con ofertas abiertas por 304 millones de dólares para el día de mañana".
Precisamente, el dólar mayorista cerró a 13,38 pesos, desde los 9,826 pesos de la víspera, un salto de 36,17 por ciento del tipo de cambio y una devaluación del 26,56 por ciento en el segmento oficial, la mayor caída desde enero de 2002.
"La gran pregunta es cuánto de la devaluación se trasladará a precios, algo que dependerá del manejo monetario y fiscal que encare el Gobierno", interpretó un analista del mercado.
"La gran pregunta es cuánto de la devaluación se trasladará a precios"
Los tipos de cambio implícitos en las operaciones bursátiles operaron en baja: el dólar llamado "contado con liquidación" y el dólar bono cerraron hoy en la zona de los 13,80 pesos.
En el promedio de bancos y casas de cambio, la divisa se pactó en la zona de 13,50 pesos para la compra y 13,95 pesos para la venta, mientras las operaciones en el mercado paralelo quedaron en torno de 14,40 pesos (-2 por ciento).
Tras la devaluación, la brecha entre el dólar en pizarras del microcentro porteño y el que se ofreció en el segmento informal se redujo a 2,85 por ciento, desde la zona del 50 por ciento previo.
En San Pablo, el real brasileño, una divisa de referencia para la Argentina por la magnitud del intercambio comercial con el vecino país, subía a 3,88 por dólar, mientras el euro se vendía en torno de 1,08 dólares.
Primera jornada sin resttricciones
Comprar dólares en la city porteña en el primer día sin cepo se transformó en una misión imposible: bancos y casas de cambio sin sistema para transacciones con moneda extranjera fue el paisaje repetido.
Los que dieron la nota fueron los "arbolitos" porque aunque algunos vaticinaban su extinción, siguieron plantados sobre la peatonal Florida al grito de "cambio, cambio" y ofrecieron un dólar ilegal de 14,40 a 14,80 pesos, "dependiendo del monto a comprar".
Cuando a las 10 se inició el horario bancario, la primera duda a despejar era saber a cuánto se iba a tasar la moneda extranjera; con ese objetivo se apostaron algunos curiosos frente a las entidades bancarias para que la pantalla luminosa de las cotizaciones despejara la mayor de las incertidumbres.
Bancos y casas de cambio sin sistema para transacciones con moneda extranjera fue el paisaje repetido.
No fue a las 10, no fue a las 11, tampoco a las 12. En todos los bancos, privados y públicos, la respuesta fue la misma: "No tenemos el sistema habilitado para transacciones con moneda extranjera y no sabemos cuándo va a llegar un nuevo comunicado del Central".
Claro, esta respuesta no conformó a todos, por lo que hubo quejas, caras de fastidio y algunos tozudos que decidieron quedarse cerca de las cajas a la espera de esa "bendita habilitación del Central".
"Estoy acá desde temprano para ver si hoy puedo comprar los 200 mil dólares del mes, aunque con lo que tengo en la billetera creo me llevo dos dólares", contó, con humor, Juan, un comerciante de la calle Perón que se había "tomado un recreito" para averiguar la primera cotización del dólar en su banco más cercano.
La casa de cambio que primero "levantó la persiana" para operar en el primer día del fin del cepo fue una ubicada en Sarmiento 460, donde había más cámaras de televisión apostadas en la puerta que personas en la fila para comprar dólares.
El gerente de esa entidad le contó que hasta el mediodía "no se registró demasiado movimiento" y sostuvo que la mayoría de la gente iba "despejar dudas más que a comprar dólares".
Una de las medidas que más enojo generó entre los primeros comprados "post-cepo" fue el cobro de un 5 por ciento, como adelanto por Impuesto a las Ganancias, para la compra de moneda extranjera en efectivo.
Susana, una rubia de unas seis décadas que contó ante cada micrófono sus peripecias para comprar dólares, relató que durante la mañana había recorrido "más de 20 bancos y casas de cambio" y "en ningún lado" le quisieron vender. Quien dio la nota en esta mañana lluviosa de diciembre fue el dirigente piquetero Raúl Castells, que sorprendió al aparecer (poncho mediante) cerca de la zona donde se concentra la mayoría de las entidades bancarias y enseguida aclaró: "Ojo que yo no vengo a comprar dólares, eh".
Por supuesto, Castells no perdió su oportunidad de dar su opinión sobre las consecuencias que vislumbra tras la liberación del dólar: "Hasta ahora vimos todas medidas para los empresarios, para los que tienen terrenos, para los grandes empresarios, para los trabajadores, nada, y esto va a empobrecer a muchos", cuestionó.