El dólar sigue en el tembladeral y en el Gobierno le prenden velas a los productores para que liquiden rápido la cosecha: en las computadoras de Hacienda siguen el minuto a minuto de cuántos camiones con soja y maíz ingresan a los puertos de Rosario, Necochea, Bahía Blanca y Buenos Aires.
"Del dólar no se habló", dijo ayer el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, al salir de la oficina en la que acababa de tener una reunión con Mauricio Macri, Nicolás Dujovne y otros ministros en la Casa Rosada. Pero aclaró que el tema es seguido "todo el tiempo" por el jefe de Hacienda.
Si bien en la administración Cambiemos intentan llevar calma a la población afirmando que la volatilidad financiera es natural y está bajo control, la suba del tipo de cambio preocupa –según admitieron fuentes oficiales- por su velocidad y pendiente, y más cuando se acercan las elecciones.
Ayer la cotización del dólar dio un respiro: bajó unos 27 centavos hasta los 42,67 pesos para la compra y 44,65 pesos para la venta en el promedio de los bancos porteños. Pero sólo retrocedió porque el Banco Central volvió a subir la tasa de interés y anunció medidas.
Ante la debilidad oficial, los bancos que "compran" las Letras de Liquidez que emite Guido Sandleris no bajan sus exigencias. Y generaron una suba de la tasa, que se ubicó en el 68,35%, casi como en los peores momentos de octubre pasado.
En el Mercado Abierto Electrónico (MAE) –donde operan grandes empresas y bancos– el tipo de cambio mayorista bajó también 30 centavos hasta los 43,55 pesos para la compra y 43,63 pesos para la venta. Las monedas de la mayoría de los emergentes se fortalecieron ante el billete verde.
Con las manos atadas por el FMI para intervenir en el mercado de cambios, Sandleris contestó a la volatilidad con política monetaria. Recalibró su estrategia para intensificar la reducción de liquidez en pesos.
Con un cambio de normativa, el Banco Central salió a buscar que las entidades financieras mejoren las tasas que ofrecen a sus clientes por sus depósitos y así logren seducir a los ahorristas para que se queden en pesos y no se vayan al dólar.
A pesar de estas estrategias casi desesperadas, el Gobierno le prende velas al campo para que venda rápido la cosecha.
La economía cayó 5,7% anual en enero
La actividad económica de Argentina se hundió 5,7% anual en enero pero mostró una reactivación del 0,6% en la comparación con diciembre, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos.
El organismo precisó que el indicador desestacionalizado de la actividad económica subió 0,6% frente a diciembre de 2018, por lo que se dio por segundo mes consecutivo un freno de la recesión. Esa leve mejora registrada en la comparación mensual de enero fue la segunda consecutiva ya que en diciembre se había expandido 1% respecto de noviembre.