Por primera vez en muchos años se pudo observar debido a las ráfagas del viento Zonda que azotó esta semana a la provincia, y especialmente al sur (Malargüe y San Rafael) el desborde del dique de El Nihuil por uno de sus vertederos.
El espectáculo llamó la atención pero las autoridades que vigilan el comportamiento de las represas y del Departamento General de Irrigación se ocuparon de explicar el fenómeno restándole importancia.
“Para eso es el vertedero”, aseguraron. Éste regula el nivel del lago, ahora totalmente lleno, para que el agua no supere el paredón.