En la mañana del 21 de noviembre de 1938, una efervescencia inédita se vivía en el aeropuerto mendocino de "Los Tamarindos". Es que miles de muchachas esperaban la llegada de él, el guapísimo Tyrone Power.
La noticia del astro de Hollywood se había esparcido días antes de su llegada a través de los medios locales. Y, claro, el suceso se convirtió en multitudinario. Pues Power era uno de los más grandes actores del momento. Nadie quería perderse la posibilidad de verlo en persona y, con suerte, llevarse un papelito con su dedicatoria.
En ese contexto, el actor charló con Los Andes; pues el galán estaba de gira por América Latina para tener contacto con las audiencias cinematográficas de esta parte del mundo y publicitar su imagen.
Power fue entrevistado en la cantina de la estación aérea, ante varios periodistas que charlaron con él a través de un intérprete. Aquí, la entrevista:
“Si bien nuestro cielo no prestó color -mañana opaca fué la de ayer- a la bienvenida de Tyrone Power, el galán cinematográfico que en un vuelo de acelerado ritmo está recorriendo los países americanos, la mujer mendocina supo suplir esta ausencia de colorido natural con un desbordante regocijo, trasunto recatado de quien sabe cuántos instantes de admiración tributada a la figura del que hasta hoy sólo se conociera en ese terreno de lejanía del séptimo arte, creador de modernos ídolos. La expectativa se agrandaba en la intimidad de los corrillos, de murmullos crecientes, y en no pocas oportunidades se traslucía a través de la inquietud con que se avistaba el horizonte como urgiendo al avión a evadirse de las nubes plomizas del oeste.”
el día en que TYRONE POWER pasó por MENDOZA
Llega un avión
“No podía faltar -tan cargado de interrogantes estaba el ambiente- la sorpresa más o menos festiva, motivada por la contenida ansia del público de ver descender cuanto antes al actor. Haciendo giros en torno a la pista de aterrizaje apareció de pronto el avión, avivándose de esta suerte las conversaciones, salpicadas ahora de exclamaciones jubilosas. Pero esos tensos minutos dieron paso luego a otros de no menos intenso fastidio, ya que el avión que llegaba a tierra no era el que traía hasta Mendoza al comediante. Unos minutos apenas y ya se decía la llegada de otro, pero entonces ya había cundido la desconfianza entre los concurrentes y se prefería el no tornar a dar bienvenidas a pasajeros desconocidos no esperados...”
Tyrone Power
“Renovada, no obstante, la afirmación de otro avión, se fué el público desplazando hasta los linderos del campo de aterrizaje, en donde ya se encontraba ubicado un piquete de agentes de la policía departamental.
“A los pocos minutos, en verdad, se avistó el avión, el cual, luego de pasar frente al compacto grupo de espectadores, dió vuelta al campo y se detuvo frente a las oficinas aduaneras. Inminente ya la aparición de Tyrone Power, acreció el interés del público, en modo especial del femenino, de suerte que cuando aquél apareció por la puerta, una avalancha jubilosa le rodeó, diciendo en alta voz sus primeras impresiones tan pintorescas como sinceras, de las cuales, sin duda indiscretamente, confiamos algunas:
-“... Es idéntico a como aparece en las películas...”
-“... Y cuánta simpatía personal...”
-“... Es más buen mozo que Robert Taylor...”
“El remolino femenino elevaba su algazara a medida que el galán repartía sonrisas y estrechaba las manos de algunas personas, al mismo tiempo que con paso elástico se dirigía a la Aduana. A la entrada de ésta se ubicó la policía para no permitir el paso más que a determinadas personas, lo cual, indudablemente, tuvo sus tropiezos, ya que el entusiasmo llevaba a algunos circunstantes a tratar de burlar esa disposición, utilizando para ello ardides en donde no estaba ausente la picardía femenina, más acentuada, si se quiere, por criolla.”
Impresiones de Tyrone Power
“Ya en el reparo de la Aduana y mientras se revisaban los pasaportes del astro cinematográfico, se entabló una animada conversación entre aquél y los circunstantes; amena por el espíritu jovial del huésped, a quien no faltó en todo su curso la palabra ingeniosa o el ademán simpático. Simpatía ésta que conquistó prestamente y anuló también el consabido protocolo.
“Requerido éste por el cronista, se refirió en primer término a la óptima impresión que traía de su jira, meramente turística, señalando su gratitud por la cordialidad con que le habían recibido todos los públicos sudamericanos. Habló luego de su carrera cinematográfica, señalando a ‘Suez’, película que está anunciada entre nosotros para la temporada venidera, como el trabajo que ha requerido del mayor esfuerzo y más dedicación, pese a que posee films de la categoría artística de ‘Lloyd de Londres’ y ‘En el viejo Chicago’, en los que no escatimó su entusiasmo de actor ni sus facultades interpretativas. ‘Jessie James’ figura también entre sus últimas producciones, habiendo ya sido estrenada con halagador éxito en Estados Unidos.”
Su actuación en las tablas
Recordó el cronista que Tyrone Power había luchado intensamente para conquistar Broadway, la famosa Vía Blanca neoyorquina que conduce a la gloria de Hollywood, requiriéndole, por ello, experiencias en el arte escénico y la posibilidad de que retorne a él.
“-Por ahora, no -nos dice resueltamente, para agregar después en forma más pausada, como requerido por una voluntad interior- más tarde, es imposible... Sin duda se arremolinan en sus recuerdos los primeros afanes teatrales de 1933 en Chicago, los sacrificios con la Compañía de la Exposición Mundial, hasta los posteriores realizados al lado de la prestigiosa artista Katharine Cornell, interpretando con la cual ‘Romeo y Julieta’ y ‘Santa Juana’ le descubrió el productor de la 20 Century Fox, Darryl E. Zanuck, que le abrió la senda del estrellato y le permitió actuar al lado de Madeleine Carroll, de Loretta Young, de Sonja Henie, de Norma Shearer y de tantas otras artistas a quienes él, sin duda, admirara más de una vez desde una butaca, encendida la imaginación de fantasías de fama y fortuna, de retribución, de sacrificios hasta el momento estériles...”
Firmando autógrafos
“Entretanto la charla jira por todos los temas, evocativa por momentos, reidera en otros, crece la impaciencia del público que se asoma a puertas y ventanas para contemplar a Power, de forma que nos vemos en la necesidad de restringir el caudal de nuestras preguntas. Por ello, una vez que el actor expresa que en el año venidero ha de ser ardua su labor pero que aún no sabe los títulos de sus próximas películas, cedemos nuestro lugar.
Alguien insinúa pasar hasta la cantina, y al hacerlo irrumpe en la sala la ola de circunstantes, remozados nuevamente los ánimos y dispuestas las exteriorizaciones. Literalmente cercado, recibe con sonrisas todos esos cumplidos que él no comprende en su expresión oral pero que aquilata por lo cordial de los rostros, florecientes en sonrisas, y por lo amistoso del ademán. La admiradora más dispuesta le solicita el pañuelo que lleva en el bolsillo superior del saco a cambio del suyo, pero su actitud sólo atina a librarlo del requerimiento, y decir que ha perdido la cuenta de los que ha dejado desparramados a lo largo de su camino. La actitud provoca un motín muy femenino pero no aminora el deseo de tener un recuerdo, y por ello le alarga un papelito para que aquél estampe su firma. Esa actitud causa un revuelo y rompe el último dique, siendo entonces la tarea de todos la de conseguir un autógrafo. Matizando su labor con algunas frases festivas, de entre las que se destaca la reclamación risueña de '¡policía, policía!', que no tiene otro fin que el de poner una nota festiva más en el ambiente, Tyrone Power, el fugaz y grato huésped de Mendoza, insume sus vacaciones en rubricar con su propio puño el acta de una total simpatía popular americana hacia su persona.
Itinerario de su viaje
“Momentos después, continuaba viaje el intérprete de ‘Idilio incógnito’, rumbo a nuestra metrópoli. Power pasará seis días en Buenos Aires y un día en Montevideo. El lunes subsiguiente saldrá en el avión de la Pan American Airways para Río de Janeiro, donde permanecerá una semana, durante la cual visitará a San Pablo y Santos.
“El 6 de diciembre saldrá de Río para Recife. En esta ciudad pasará la noche, y el 7 por la mañana emprenderá vuelo para Belem, donde también pernoctará. El 8 de diciembre partirá de Belem para Puerto España, donde invertirá un día y una noche, y el 10 de diciembre, siempre en aeroplano, se dirigirá a San Juan de Puerto Rico, de donde marchará a Miami el día 11 del mismo mes. El 14 abandonará Miami rumbo a Los Angeles a donde llegará el día 15.
“Durante su viaje Power recorrerá 32.000 kilómetros, insumiendo en ello por los menos seis semanas. Será éste el viaje aéreo más largo emprendido por cualquier astro de la pantalla.”
Rumbo al Plata
“Finalizada la entrevista, el actor fue invadido por las jóvenes -y no tanto- para pedirle autógrafos.
“Luego se indicó que los pasajeros del vuelo de Panagra deberían regresar. Abordó su avión con destino a Buenos Aires y cuando comenzaron a ponerse en marcha los motores, por la ventanilla del avión, Tyrone agitó su mano despidiéndose de nosotros.”
El cine, un espectáculo cada vez más masivo
Nuestro diario fue uno de los medios nacionales que dio cuenta de cómo el cine y sus estrellas ocupaban cada vez más espacios entre las prácticas masivas. En esta edición de Los Andes del martes 22 de noviembre de 1938, además del despliegue periodístico sobre la llegada de Tyrone Power, se lucen otros titulares: "'La venganza de Bulldog Drummond' estrenaráse en el Cine Independencia", "Estrenará 'Turbión' en su función nocturna de mañana el Buenos Aires", "'Yo traicioné' anuncia como estreno para la fecha el C. Centenario", entre más.
Dato curioso
Tyrone Power regresaría a Mendoza el 16 de setiembre de 1946 en su avión particular, acompañado por el actor César Romero (su amigo y coprotagonista de varios proyectos), junto otros directivos de la 20th Century Fox.
En su breve visita fueron recibidos por varios empresarios del cine local, que agasajaron a los visitantes estadounidenses. Ellos emprendieron luego su viaje hacia el aeroparque metropolitano.