Un Independiente de pobre rendimiento fue claramente superado por Atlético Tucumán que le ganó 2-0 en el Libertadores de América, por lo que hubo una reprobación generalizada de la parcialidad roja para sus jugadores.
Al minuto de juego Atlético durmió literalmente a Independiente ya que tras un pelotazo preciso de González para Zampedri, el atacante le ganó la espalda a Tagliafico, quien se demoró en salir, y con todo el tiempo del mundo definió mano a mano ante Campaña.
Al conjunto de Milito se lo vio desatento en defensa, impreciso en la generación de juego y estático en la ofensiva, mientras que su adversario estuvo bien ordenado y complicó una y otra vez con envíos largos.
A los 22’ Di Placido lanzó un centro desde la derecha para Rodríguez, quien cabeceó en soleadad y obligó a una destacada atajada de Campaña. El trámite terminó de complicarse para el Rojo a los 42’, cuando Toledo fue expulsado por doble amarilla.
Para la segunda parte, Milito se jugó con dos cambios ofensivos, con los ingresos de Denis y Barco por Rodríguez y Ortiz y prácticamente planteó un partido para empatar o morir en el intento. Desde el principio propuso un juego de ahogo y pudo haber logrado la igualdad, pero Denis desvió su remate tras un centro de Rigoni.
Dos minutos más tarde el local volvió a sufrir por sus distracciones defensivas y en una jugada que empezó con un lateral Zampedri aguantó la pelota para Rodríguez, La Pulga buscó el segundo poste y González aumentó la distancia. A partir de entonces, fue un festival de contraataques de Atlético, que pudo haber marcado mas goles.
Así en el campo de juego Atlético fue mucho más que Independiente, justamente en un choque entre dos equipos que aspiran a obtener la clasificación para la Copa Libertadores de América 2017.