Los tires y aflojes entre peronista y radicales sumaron este jueves un nuevo capítulo en la reunión de la Comisión de Jury de Magistrados. Allí debían definir cómo continuaría el proceso contra el juez Antonio Sánchez Rey que reclama una indemnización millonaria. Sin embargo, la sesión se cayó por la retirada del PJ.
La Comisión de Jury está integrada por 21 miembros: los siete jueces de la Corte, siete diputados y siete senadores de los distintos partidos. El organismo establecido y regulado constitucionalmente se encarga de evaluar las denuncias que llegan contra los jueces de las Cámaras de apelaciones, los de primera instancia, los fiscales, asesores y defensores oficiales. Justamente, en el encuentro de hoy se debía decidir sobre tres magistrados distintos.
Por un lado, se evaluaron las denuncias presentadas por el senador Marcelo Romano y el diputado nacional José Luis Ramón, de Protectora, contra los fiscales Gonzalo Nazar y Sebastián Capizzi. En ambos casos, los legisladores cuestionan la decisión de archivar una denuncia penal contra los funcionarios públicos.
El argumento presentado por los referentes de Protectora ante la Comisión de Jury fue por la decisión de los fiscales de no investigar su denuncia por supuestas irregularidades en la concesión de Penitentes.
Además, el Jury debía resolver sobre un planteo de nulidad presentado por la defensa de Sánchez Rey, que reclama $ 4,5 millones por parte del Estado por un accidente sufrido en el Juzgado en el que se desempeña.
Pero esto último quedó dilatado por al menos una semana más, luego de que la denuncia contra Capizzi y Nazar fue archivada por los radicales.
La situación dejó en evidencia, una ves más, la novela que protagonizan hoy los dos principales partidos políticos de Mendoza. Es que además de la pelea por la decisión del peronismo de rechazar el pedido de endeudamiento hecho por el gobernador Alfredo Cornejo para diversas obras, entre ellas el Girsu (Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos), ahora se suma la insólita situación del Jury de Enjuiciamiento.
Es que los legisladores del PJ decidieron irse argumentando la ausencia de tres miembros de la Corte: Julio Gómez, Mario Adaro y Omar Palermo (todos ligados al peronismo), y de sus reemplazos. Si bien la reunión contaba con 12 integrantes, lo que garantizaba el quórum, los justicialistas interpretaron que se necesita la presencia de todos los jueces.
“Es la primera vez que se da una situación así, en la que un partido se retira. Hicieron una interpretación extraña. El quorum se alcanza con la mitad más uno de los miembros, no se exige la presencia de cada uno de los miembros de la Corte”, explicó el senador Juan Carlos Jaliff.
Sin embargo, una de las protagonistas de la retirada, la senadora Patricia Fadel, argumentó: “Faltaban tres miembros y si se tomaron licencias debían ser reemplazados”.
Además, Fadel explicó que “se ponían a consideración tres cuestiones. Respecto a Nazar y Capizzi nosotros consideramos que al menos debían ser escuchados porque la denuncia presentada por el senador Romano sostiene que actuaron arbitrariamente, y es probable que así haya sido”. “Pero los radicales y los miembros de la Corte tenían decidido archivarla, y así fue”, agregó la legisladora.
Entre los que estuvieron presentes, se cuentan los jueces Dalmiro Garay, Jorge Nanclares, Pedro Llorente y José Valerio, además de los senadores radicales Juan Carlos Jaliff, Marcelo Rubio, Miguel Bondino y Adrián Reche. Mientras que por parte de los diputados oficialistas estuvieron Jorge Albarracín, Jorge López, Analía Jaime y Pablo Priore.
Por su parte, junto a Fadel dieron la media vuelta de la reunión el senador Alejandro Abraham y Samuel Barcudi y los diputados Helio Perviú y Daniel Rueda. Junto a ellos también se retiró el diputado Mario Vadillo, de Protectora.