Una nena de 12 años fue testigo del peor escenario imaginable. Cuando regresó el domingo por la noche a su casa, ubicada en la intersección de calle Guido Spano, en el ingreso del barrio Solares del Centro, en San Martín, no pudo entrar. Golpeó insistentemente a la puerta, pero no obtuvo respuesta. Preocupada por la inusual situación, la chica pidió permiso a un vecino y trepó la medianera. Ya dentro de la vivienda encontró manchas de sangre y a su mamá Ivana Milio (46) sin vida, con varios golpes en el cuerpo.
La escena del brutal femicidio que conmociona a Mendoza demostraba que la mujer había sido ultimada con una saña poco veces vista. Sobre esto, el fiscal que interviene en la causa, Oscar Sívori, dio detalles escalofriantes de las heridas que presentaba el cuerpo de Ivana.
"Para mí todas las muertes que se dan en contextos de violencia de género son muy violentas. Pero no había estado en una escena de crimen tan violenta como la que vi ahora. Las lesiones que ha recibido Ivana Milio en su rostro demuestran la brutalidad con la que fue ultimada", dijo Sívori.
"Tiene quebrada la mayoría de los huesos de la cara".
Y agregó: “Tiene quebrados la mayoría de los huesos de la cara, tiene fracturas de partes que los forenses me comentaban ayer que ellos no han visto ni en los accidentes de chicos sin casco”, detalló Sívori a Radio Mitre Mendoza.
"Lo vamos a terminar de corroborar con las pericias de Policía Científica y las pruebas pero da la sensación de que ha sido golpeada con un borde romo en la nariz, tiene hundimiento de muchos huesos. Esto los médicos lo indicaban por el color violáceo de los ojos que tenía y no tenía nariz", contó a ese medio el fiscal.
Anoche, se entregó el principal sospechoso del crimen, Julio Mendoza (32), pareja de la mujer. En las próximas horas será imputado por homicidio doblemente agravado. Ivana Milio fue asesinada en la noche del domingo en San Martín. La víctima es miembro de una reconocida familia del departamento y tenía tres hijos.
