El Senado convirtió en ley el proyecto destinado a promover la competencia en los supermercados y frenar los abusos de posición dominante, conocido como ley de Góndolas, pese a las críticas de empresarios del sector y hasta de los mismos senadores que la apoyaron, que advirtieron que será impracticable.
El proyecto de Góndolas fue promovido por los diputados Mario Negri y Elisa Carrió en abril del año pasado y terminó siendo ley en el gobierno de Alberto Fernández, que la señaló como un contribución al programa de lucha contra el hambre y la incluyó en el temario de las sesiones extraordinarias.
Tras una enrevesada discusión en comisiones, el 20 de noviembre pasado, sobre el final de la presidencia de Mauricio Macri, la Cámara de Diputados le dio media sanción al proyecto por 182 votos afirmativos, 0 negativos y 17 abstenciones (es decir diputados que no votaron).
Ayer, con gobierno nuevo, la iniciativa fue convertida en ley por 56 votos afirmativos, 0 negativos y 4 abstenciones.
Qué dijeron los senadores
El hecho de que la ley haya sido sancionada por unanimidad en ambas cámaras no la ahorró de duras críticas de los propios senadores.
Uno de ellos fue el cordobés Ernesto Martínez, de Juntos por el Cambio, que sentenció que "no servirá absolutamente para nada".
"Hablo en nombre de una fuerza política que ha fracasado en su política económica (Juntos por el Cambio), pero en mi caso no he quedado castrado para advertir: el nuevo gobierno que, como todos, día a día se va poniendo viejo, tiene todo el derecho a realizar anuncios positivos o aparentemente favorables, como este que hoy se va a aprobar. Lo que no debemos todos es continuar generando frustraciones colectivas configuradas con fuerza de ley", aseveró.
El referente del Frente Cívico cordobés lamentó que el Frente de Todos, que en el Senado tiene una mayoría de 41 sobre 72 senadores, haya apurado el trámite del proyecto cuando podría haberse discutido "una semana más en comisión", lo que a su criterio "hubiera servido para darle sentido y operatividad, cosas que no tiene".
"En nuestro país muchas veces nos ponemos a inventar la rueda, y encima cuadrada. No existen antecedentes internacionales que tengan relación directa con el proyecto venido en revisión de Diputados", aseveró.
El centro de la crítica de Martínez es que la ley les impone a las grandes cadenas de supermercados obligaciones de exhibición pero no de compra de productos a pymes y proveedores regionales. Afirmó que "no se deben sacralizar las pavadas" y que "hay que imponer la ley de Defensa de la Competencia, la de Lealtad Comercial y la de Defensa del Consumidor", que ya están en vigor. "El resto es marketing, ya que estamos hablando de supermercados", dijo.
Respecto de una de las partes del proyecto de ley, que exige la presencia de al menos cinco proveedores para cada producto, se preguntó: "¿Y si no hay cinco proveedores? ¿O si las condiciones de compra y venta de cada producto no convencen ni al que vende ni al que compra?".
Poné los fideos
Otro senador que criticó la iniciativa fue el rionegrino Alberto Weretilneck, quien vaticinó que "no va a garantizar una transparencia ni una mejora en el precio de los productos", porque "se queda por la mitad, abunda a lo que ya tenemos, y va a generar innumerable cantidad de conflictos en su aplicación".
"Me fui al sector de los fideos, que tenía 7,5 metros de largo. Entonces, ¿qué hice? Destiné el 70 por ciento a las empresas que no son ni pymes, ni micropymes regionales ni de agricultura familiar. Me quedaron 5,25 metros destinados al resto, teóricamente a las grandes empresas que con la ley decimos que vamos a combatir. Si divido estos 5,25 metros por 5 empresas o cinco productos de distintas fábricas que tienen que estar presentados, queda 1 metro por cada una de las empresas. Entonces, empecé a contar los productos: moñitos, tirabuzones, mostacholes, fetuchini, espagueti y sopero, por decir algo, 7 productos. Cada paquete de fideos tiene 17 centímetros de ancho, con lo cual, cada una de las empresas productoras de fideos puede colocar 6 productos nada más, por 50 centímetros de fondo, son 30 productos. Es decir, es absolutamente impracticable, porque exigiría un sistema de reposición cada una hora o dos horas", detalló el legislador de Juntos Somos Río Negro.
A favor
Como presidenta de la comisión de Legislación General, que se encargó de estudiar la iniciativa antes de llevarla al recinto, la senadora Ana Almirón, del Frente de Todos fue la encargada de defender el proyecto en el recinto y dijo que entre un 74 y un 78 por ciento de los productos que se comercializan en nuestro país "están en manos de las seis cadenas grandes de supermercados". Por eso consideró necesario regular el sistema estableciendo "reglas claras y justas", para que "más productores puedan crecer y producir, y permitir acceder a productos más justos y más baratos".
Recordó la senadora correntina recordó que la norma establece la limitación para exhibir un producto en no más del 30 por ciento de la góndola, como así también un mínimo de ese producto debe tener al menos cinco proveedores.