Afuera de la sala reinaba el ruido. A tal punto eran altos los decibeles que el tribunal hizo un cuarto intermedio para que Roberto Macho y Raquel Blas calmaran a los manifestantes que batían los bombos.
Cuando culminó la jornada del juicio oral y público, en la calle era una fiesta. Blas volvió a mencionar que el juicio no era más que un intento de amedrentar a los estatales en las paritarias que se vienen, pero que iban a mantener el pedido de incremento salarial del 50%.
Después habló el secretario General de ATE nacional, Julio Fuentes, quien dijo que "el conflicto social no se soluciona con el Código Penal; se soluciona con políticas redistributivas".
Cerró Micheli, quien dijo que "da vergüenza; con todos los problemas que tenemos en Argentina, que los compañeros estén sentados en el banquillo de los acusados, en lugar de estar juzgando a los verdaderos responsables de las crisis".