A poco más de ocho meses del siniestro vial que protagonizó Roberto Aucachi Cisneros, conductor de una Nissan Frontier, la audiencia de prisión domiciliaria quedó suspendida. La defensa presentó un certificado por problemas de salud y el tribunal pospuso el encuentro, sin fecha programada.
Por tal motivo, continuará detenido el autor de la tragedia del Acceso Este. El 14 de enero pasado Cisneros conducía con casi dos gramos de alcohol en sangre (1,81) por la lateral Norte del Acceso Este, a metros de calle Tirasso, y embistió a un grupo de jóvenes y niños que viajaban para jugar un partido de fútbol.
El conductor quedó detenido por doble homicidio simple con dolo eventual y lesiones leves condolo eventual, por lo que arriesga una pena que va de los 8 a los 25 años de prisión.
En la mañana de este lunes el juez que entiende la causa decidiría si Cisneros esperaría el juicio con prisión domiciliaria o si continuaría alojado en el penal. Sin embargo, la defensa del conductor presentó un certificado por problemas de salud.
El padre de Gabriela, una de las víctimas fatales, Jorge Riquelme, recordó el episodio. Cuando le dieron aviso de que sus hijas habían sufrido un accidente vial, inmediatamente fue hasta el lugar y se encontró con la peor escena.
"Cuando llegué estaba mi nietito gritando, llorando, a los gritos, y veo a mi hija tirada, mi otra hija más allá tirada, la bebé de ella adelante ya fallecida porque era más chiquita, mi hija apenas respiraba, tenía los ojos abiertos, la boca abierta, le salía sangre de la boca y la nariz, oído y llegó la ambulancia, no entendía por qué no se la habían llevado y después me explicaron que era para tratar de que respirara", expuso.