En las últimas horas el Partido Obrero (PO) de Mendoza, integrante del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) le reclamó a su concejal Rubén Tomasetti, “la renuncia inmediata a la banca que ocupa en San Martín”, por haber apoyado con su voto, la aprobación de un Presupuesto municipal al que la izquierda mendocina considera un “ajuste contra los trabajadores y toda la población explotada”.
Sin embargo y lejos de acatar la orden partidaria, el edil cuestionado salió a defender su postura y señaló que al menos por el momento, no tiene pensado renunciar a su banca: "El Partido Obrero y el Frente de Izquierda deberían leer el Presupuesto que se aprobó en San Martín, antes de asegurar que es en contra de los trabajadores", desafió Tomasetti en diálogo con Los Andes.
En San Martín, la aprobación del Presupuesto para el año 2016 no fue un trámite sencillo para el oficialismo y su tratamiento se frustró hace quince días por la falta de quórum, luego de que la oposición se levantó de sus bancas y abandonó el recinto. Con siete votos (los seis del oficialismo más el del radical Omar Abdo) al FpV le alcanzaba para aprobar el Presupuesto, pero no el endeudamiento por $78 millones que pretendía obtener la comuna.
Y si bien en un principio se aseguró desde algunos sectores que los ediles opositores esperarían hasta la integración de los nuevos miembros para tratar el proyecto (incluso hubo una conferencia de prensa al respecto ofrecida por dos concejales electos por Cambia Mendoza), las conversaciones durante el fin de semana llevaron a que el lunes 30 de noviembre, el Presupuesto fuese finalmente aprobado, en general, por el voto unánime de los doce concejales.
En su aspecto más amplio, el Presupuesto de la comuna de San Martín prevé una pauta de gastos de $ 629 millones, es decir, un 22% más que los casi $ 517 millones aprobados en 2015 y también, un endeudamiento por 78 millones de pesos. “Es un Presupuesto austero, que se ajusta a la crisis financiera y que responde a esa situación, haciendo recortes en distintos gastos como son pauta publicitaria o eventos”, afirmó el presidente del Concejo Bartolomé Robles (FpV).
Robles desmintió haber señalado que se trata de un “ajuste o un recorte que impactará directamente en la partida de personal o de servicio”, tal como apareció en algún medio regional. “Lo que dije es que si no se aprobaba el endeudamiento íbamos a tener que tocar la partida de sueldos, pero eso no va a ocurrir porque los concejales opositores entendieron que la deuda es para sostener un aumento en los sueldos de alrededor del 22%, que estimamos se dará en paritarias”.
Consultado sobre su decisión de acompañar con su voto la aprobación en general del Presupuesto, Tomasetti señaló que “de ninguna manera es un Presupuesto que ajuste a los trabajadores y en realidad, el 60% de los recursos está destinado a sueldos y servicios. Es cierto que es un Presupuesto austero, pero el ajuste se ha realizado en otras áreas como son eventos y propaganda”.
Finalmente y respecto al pedido del Partido Obrero para que renuncie a su banca, Tomasetti señaló: “La línea partidaria es votar en contra los presupuestos y así lo he venido haciendo, pero le pido a las autoridades del partido que lean este proyecto porque no va en contra de los trabajadores como aseguran. No lo han leído y no hay tal ajuste; no voy a renunciar porque no creo haber actuado en contra del trabajador y en todo caso, eso es algo que tendré que discutir con la gente y con los trabajadores que me acompañaron en la campaña y que me permitieron llegar a concejal”.