Las descargas ilegales de películas dejaron de ser una excepción hace mucho tiempo para ser una regla de consumo masivo. Cada vez que llega la época de los Oscars es muy sencillo conseguir ver las nominadas aunque aún no hayan sido estrenadas en los cines de nuestra ciudad ¿Por qué? porque alguien se encarga de distribuir ilegalmente alguna copia de la película en cuestión y una vez que llega a internet parece imposible de detener.
Pero el problema no están en las copias filtradas ni en las descargas sino en la forma de consumo de los usuarios. La gente quiere ver cine y no tiene paciencia para esperar que llegue el día de estreno que muchas veces no coincide en todos los países.
Esa ansiedad la entendieron los productores de las series de TV, los músicos y hasta los desarrolladores de videojuegos. Esa parte de la industria del entretenimiento aún padece la piratería pero logró encontrar una solución para bajar los índices de descargas ilegales. ¿Cómo lo lograron? ¿Qué debe aprender el cine de sus parientes de otras áreas?
