Los múltiples precios que tiene el dólar en la Argentina subieron esta semana. El Banco Central convalida que el peso se devalúe y se mueve en consecuencia, pero no acepta la proporción que exige el mercado.
En el promedio bancario, el precio del dólar subió 73 centavos en la semana y cerró ayer en los 68,69 pesos. Es un valor "testigo", dado que al comprar para atesoramiento hay que pagar el impuesto País del 30%, por lo que el precio real es de 89,30 pesos.
Esa suba se dio porque el Banco Central empuja el precio en el mercado mayorista donde operan los bancos. ¿Cómo lo hace? Ubica todos los días su posición de venta unos centavos más arriba. Así, en la semana, el mayorista ascendió 57 centavos, hasta los 66,43 pesos.
El precio del dólar viene subiendo por goteo desde el 23 de enero. A lo largo de 59 jornadas hábiles acumuló de forma consecutiva y sin interrupciones un alza de 6,34 pesos, es decir, 10,6%, más o menos en línea con la inflación del mismo período.
Al principio las subas intradiarias eran de cinco centavos. Pero a partir de la cuarentena que se inició el 20 de marzo, el proceso se aceleró. En el Gobierno explican que es mejor devaluar por goteo para mitigar el impacto en precios que hacerlo de golpe tras la cuarentena.
El sector agroexportador liquidó 4.376 millones de dólares desde que se inició el año, un 24,5% menos que en el mismo período de 2019. Así, el Central tiene que vender para cubrir la demanda y en la semana se desprendió de 121 millones de dólares de sus reservas.
Presiones
El mercado bursátil maneja otros valores. El precio del dólar "contado con liqui", al que se accede vía compra y venta de bonos, cerró ayer en los 112,02 pesos por unidad. Subió 9,1% en la semana, 28,9% en lo que va del mes y 50,5% desde que arrancó 2020.
Iba a subir más, pero la Comisión Nacional limitó al 25% las tenencias en dólares de los Fondos Comunes de Inversión (FCI) en pesos. Aquí están los principales operadores de llamado "contado con liqui".
Y el Banco Central subió del 11,4% al 15,2% la tasa que se pagan entre sí los bancos cuando se prestan efectivo. Y resolvió que los fondos de los que se puede retirar dinero en cualquier momento no tengan encajes, lo que permite a los bancos ofrecer una mayor remuneración de esos depósitos.
En las cuevas financieras que operan en la Capital Federal, el precio del billete saltó de 105 a 117 pesos en la semana. El jueves llegó a tocar los 120 pesos. La Unidad de Información Financiera (UIF) llegó a emitir un comunicado en el que expresó que está investigando por sospechas de un alto lavado de dinero en este mercado.
Aldo Abram, explicó a este diario, que las nuevas restricciones a la operatoria de los precios "paralelos legales" (los de la Bolsa) "apenas disminuirá la huida del peso y sólo generará una mayor demanda de divisas en el mercado "blue", lo que producirá mayor informalidad en la economía.
Para Abram, la emisión monetaria es tan grande que está inundando de pesos una economía en la que la demanda de ese dinero no es tal. Y por lo tanto, hay sectores (minoritarios) a los que les termina sobrando el efectivo y busca un refugio, por lo que va al dólar.
"Si se produce mucho y nadie lo quiere, como ocurrió con el petróleo, lo que pasa es que se destruye el valor de ese producto. Y esto se ve reflejado en el mercado cambiario. El peso pierde valor y la gente huye de él", dijo Abram.
Para el economista, esto no es consecuencia de pandemia porque en Chile, Uruguay, Perú o Colombia no ocurre. Esto, dijo, es el resultado del déficit fiscal, la presión tributaria "altísima" y que la Argentina gastó todo el crédito internacional que tenía. "Entonces mientras otros usan ese crédito para financiar el mayor gasto por la pandemia, acá se imprimen pesos", señaló.