Eduardo “Cato” Aguilar, uno de los hinchas más reconocidos del Lobo, tiene una cábala surgida allá por la década del ‘80 y ayer volvió a realizarla esperando que hoy el equipo le dé una de las más grandes alegrías de su vida.
La misma consiste en recorrer todo el campo de juego del Víctor Legrotaglie de rodillas. Todo un personaje.