El Banco Central de Miguel Pesce decidió reflotar una herramienta del kirchnerismo: la cuenta de ahorro universal. Se trata del acceso gratuito para cada ciudadano a una cuenta corriente con una tarjeta de débito asociada. El directorio del BCRA aprobó el relanzamiento de la Cuenta Gratuita Universal (CGU).
Según explicó la entidad en un comunicado este producto tiene como objetivo favorecer la inclusión financiera de los sectores más vulnerables, promover una mayor bancarización y facilitar el acceso a los a medios de pago, contribuyendo con las acciones del Plan Nacional de la Argentina contra el Hambre".
A diferencia de lo que ocurría en la gestión anterior, el Central les dio a los bancos una semana de plazo para ofrecer, sin excepción, este producto. Podrá solicitarlo cualquier persona que no posea cuenta bancaria el momento, en el banco que elija, solo con la presentación de su DNI.
"La CGU es una caja de ahorro en pesos El Banco Central relanza la cuenta gratuita única y obliga a los bancos a ofrecerla y la apertura, el mantenimiento, los movimientos de fondos y las consultas de saldo son gratuitas. Con la apertura de la Cuenta Gratuita Universal, los usuarios accederán sin cargo a una tarjeta de débito y a las claves de banca móvil", detalló el organismo.
Además, se detalló que los bancos, al momento de abrirse la cuenta, deberán ofrecer, sin ningún trámite previo, una tarjeta magnética a cada titular, que podrá reemplazarla sin cargo en caso de desmagnetización.
Mirá también El Banco Provincia lanzó créditos por $ 15.000 millones Con esta normativa, el Banco Central no sólo dispone que las extracciones de dinero físico en los cajeros automáticos sean gratuitas en la red de ATMs de la red del banco elegido; sino que también se podrán hacer otras ocho extracciones por mes en otras entidades y redes de todo el país.
Otro de los puntos que deja claro la norma es que las entidades deberán informarle a sus clientes y potenciales usuarios de esta opción en sus soportes digitales y con cartelería en sus puntos de atención al público.
Para evitar el lavado de dinero, la UIF controlará que los saldos de estas cuentas el a 25 salarios mínimos vitales y móviles –aproximadamente $ 421.875 a diciembre de 2019– y las operaciones mensuales en efectivo no superen el equivalente a 4 salarios mínimos vitales y móviles –aproximadamente $ 67.500 a diciembre de 2019– "Con el relanzamiento de esta medida, el Banco Central busca dar un mayor impulso a la inclusión financiera y avanzar hacia una plena bancarización de la población de todo el país", remarcó el organismo.