Mohamed Lahouaiej Bouhlel, el autor del atentado en Niza donde murieron 84 personas, habría enviado unos 100.000 euros a sus familiares en Túnez unos días antes de la masacre.
También los investigadores sostienen que el ataque fue minuciosamente planeado por su autor, que envió mensajes a algunos de sus posibles cómplices.
El transportista de 31 años, que embistió a una muchedumbre con un camión dejando 84 muertos, “se tomó además una foto al volante del camión entre el 11 y el 14 de julio” que envió por SMS, según las fuentes.
Varios testigos, entre los cerca de cien interrogados por la policía, mencionaron también por primera vez que mostró signos de religiosidad. Su padre en cambio había afirmado que “no tenía ningún vínculo con la religión”, que bebía alcohol y no iba a la mezquita.
Por otra parte, fuentes allegadas a la investigación indicaron que Lahouaiej-Bouhlel, hasta ahora desconocido de los servicios de información franceses, estuvo con el camión en el paseo de los Ingleses el 12 y el 13 de julio preparando el atentado del 14 de julio.
Al penetrar el jueves por la noche con su camión de 19 toneladas en el famoso paseo, atestado de familias y turistas que celebraban la fiesta nacional, Lahouaiej-Bouhlel arrolló a la multitud y mató a 84 personas, entre ellas diez niños y adolescentes, e hirió a otras 200.
Entre las víctimas mortales figuran 17 extranjeros.
Ayer, 85 personas seguían hospitalizadas, 18 de ellas, incluyendo a un niño, con pronóstico reservado, informó la ministra de Sanidad, Marisol Touraine.
Además, las autoridades francesas dicen que resta identificar a 16 de los muertos y un herido en el ataque en Niza del Día de la Bastilla.
Según algunos de sus vecinos, el atacante, que la organización yihadista presentó como “un soldado del Estado Islámico”, tenía un perfil de persona desequilibrada, que vivió múltiples “crisis” familiares.
Las autoridades detuvieron el domingo a otras dos personas, un hombre y una mujer, según una fuente judicial. Cuatro hombres del entorno de Lahouaiej-Bouhlel seguían arrestados.
Su exmujer, detenida desde el viernes para ser interrogada, fue puesta en libertad.
Todo indica que el atacante “se radicalizó muy rápido”, aseguró el sábado el ministro del Interior francés Bernard Cazeneuve, en base a testimonios de allegados.
“Nos enfrentamos a individuos sensibles al mensaje del Estado Islámico, que llevan a cabo acciones extremadamente violentas sin necesariamente haber combatido o haber sido entrenados”, añadió el ministro, destacando que se trata de un “nuevo modo” que ilustra “la extremada complejidad de la lucha antiterrorista”.
Liberan a esposa del conductor del camión
La esposa separada de Mohamed Lahouaiej Bouhlel, el conductor del camión que mató a 84 personas el jueves por la noche en Niza, fue puesta en libertad ayer después de ser interrogada, informó un funcionario francés de la fiscalía de París.
La mujer es la madre de los tres hijos de Bouhlel y estaba en el proceso de divorciarse de él. Ella fue detenida el viernes, un día después de que el hombre, un tunecino de 31 años de edad, arrollara a los espectadores de los fuegos artificiales por el Día de la Bastilla en el famoso paseo marítimo de Niza.
Los investigadores, a la caza de posibles cómplices, detuvieron a dos personas y, en total, seis personas permanecen bajo custodia en relación con el ataque, que el grupo Estado Islámico ha reivindicado.
Agencia AFP
El Papa oró por las víctimas del ataque en Francia
Estoy “cerca de cada familia y de toda la nación francesa de luto”, dijo el papa Francisco ayer al referirse al atentado del 14 de julio en Niza, que dejó 84 muertos.
“En nuestros corazones está vivo el dolor por la tragedia que, la noche del pasado jueves, en Niza, truncó muchas vidas inocentes, incluso muchos niños”, agregó Francisco ante miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro para el Ángelus.
“Un abrazo paterno y fraterno a todos los habitantes de Niza y a toda la nación francesa. Y ahora, todos juntos, oremos pensando en esta tragedia, en las víctimas, en los familiares”, concluyó Francisco en el saludo después de la oración dominical en la que pidió a los fieles que “aprendan a escuchar” ya que en esa capacidad “está la raíz de la paz” y renovó sus demandas por una “verdadera hospitalidad”.
AFP