El submarino "ARA San Juan" y sus 44 tripulantes eran intensamente buscados con modernos equipos en las profundas aguas del Atlántico Sur, 12 días después de su desaparición.
Pese a que la ilusión de que los submarinistas, entre ellos una mujer, estén con vida en el fondo del mar se desvanece cada día, el vocero de la Armada, el capitán de navío Enrique Balbi, dijo este domingo que "si bien van 11 días, esto no quita que puedan estar en una situación de supervivencia extrema".
"Por remota que sea la posibilidad (de sobrevida) aún no la abandonamos", dijo por su lado el capitán de marina Román Olivero, quien colabora en los vuelos de búsqueda por avistaje de un avión militar norteamericano P-8.
"Las probabilidades han disminuido pero no son cero", agregó.
El experto ingeniero naval Horacio Tettamanti dijo que "considero descartada toda capacidad de sobrevivencia a partir del día 14. Tampoco descarto un milagro".
Elisa Carrió había dado por "fallecidos" a los tripulantes en un programa especial del canal 13 la noche del sábado.
La cápsula de EEUU
El mayor "esfuerzo de búsqueda se concentra en las unidades de superficie" con sonares y radares, dijo Balbi.
Las operaciones del "ARA San Juan", que habría sufrido una explosión, se organizan desde la mayor base de la marina argentina, en Bahía Blanca
En la zona de búsqueda hay olas de tres metros y vientos muy fuertes, según partes meteorológicos.
La esperanza de hallar al sumergible, que se comunicó por última vez el 15 de noviembre para reportar una avería en las baterías, se centran en los modernos equipos de detección enviados por Estados Unidos y Rusia. Ambas misiones aún no llegaron al área de rastrillaje, a más de 450 km de las costas de la Patagonia (sur).
"De un despliegue de esta magnitud (14 países) no hay antecedentes en la historia naval de la humanidad. La búsqueda más difícil en el mar fue la del Titanic, en la inmensidad, después de casi un siglo, sin ningún tipo de precisión de la ubicación y a 5.000 metros. Y fue encontrado. Tengo la convicción de que el ARA San Juan será hallado", dijo Tettamanti.
El lecho marino en la zona de búsqueda "es muy irregular, con muchos cañadones y quebradas", apuntó Carlos Zavalla, un excomandante del navío, en el mismo programa de canal 13.
Al operativo se sumó el domingo el buque civil Sophie Siem con una cápsula estadounidense de rescate, tras zarpar desde Comodoro Rivadavia, 1.750 Km al sur de la capital.
Antes de partir, en un emotivo momento, el capitán del barco, Aníbal Miranda, agradeció a los marinos formados, entre ellos norteamericanos. Los llamó "hermanos del mar"
Los familiares siguen desolados
Los desconsolados familiares de los marinos han hecho críticas muy duras. "Sufrimos mucho cuando nos dijeron que había siete llamadas desde el submarino y después nos dijeron que no era cierto", dijo Itatí Leguizamón, esposa del tripulante Germán Suárez.
"El nivel de accidentes en las fuerzas armadas ha estado por encima de lo normal y ello ha tenido que ver con la antigüedad del material y la limitación de recursos para mantenimiento y adiestramiento", dijo el analista y experto en cuestiones militares Rosendo Fraga, de la consultora Nueva Mayoría, al aludir a los posibles orígenes del accidente.
La Armada ha descartado de plano que el navío sufriera algún tipo de ataque.
"El 90% del equipamiento de las fuerzas armadas (FFAA) argentinas tiene entre 30 y 50 años de antigüedad. Si tomamos el caso del submarino San Juan, se incorporó a la Armada hace 32 años y era uno de los buques más modernos", reveló Fraga.
El descuido en la modernización de las FFAA "es consecuencia de una visión anti-militarismo que surgió en el mundo político tras el último golpe militar (y dictadura entre 1976-83) y por la falta de prioridad o urgencia, del tema militar en las últimas décadas", fundamentó el analista.
El episodio despertó tensiones en el gobierno, pese a que el presidente Mauricio Macri llamó esta semana a "no aventurarse en buscar culpables".
Fuentes militares citadas por la prensa local, señalan que el contralmirante Gabriel González, jefe de la base naval de Mar del Pata, habría pedido su retiro.
"Más allá del dolor, la cuestión será si la tragedia plantea el necesario debate sobre la reforma militar, que es una gran asignatura pendiente, desde antes que llegara Macri (en 2015)", dijo en tanto Fraga, quien consideró que "el rescate del submarino llevará tiempo".
El "ARA San Juan" fue botado en Alemania en 1983. Desde 1985 es uno de los tres submarinos de la Armada argentina. Entre 2008 y 2014 se le practicaron reparaciones de media vida.