La pareja se postea de manera permanente en redes sociales...Se muestran abrazados, muy juntos, incluso detallando por face que están en "una relación".
Una verdad que muchos viven de manera diferente puertas para adentro, quizá soportando situaciones, modos de ver la vida, y hasta negociaciones innegociables, por el “qué dirán”, o por no estar solos...¿Qué claves tener en cuenta para rever la razón de tener una relación por uno mismo, y no por los demás?
Según explica la médica psiquiatra, y docente universitaria, Gabriela Prats: "Si una persona se siente bien con su relación, tiene que ver con que está segura de sí misma, y dispuesta a compartir diversas situaciones con un otro, así como también a tolerar las diferencias que se tengan, porque el vínculo lo vale en muchísimos aspectos que la hacen feliz".
Hay un dicho que profesa: “La relación más importante es que la tengo conmigo mismo/a”. Un pensamiento que cree en estar bien y ser feliz desde la propia persona, para poder amar y ser amado por otra, no como extensión sino como algo más que forma parte de la vida.
“Si una persona está con otra por no estar sola puede llegar a desarrollar una dependencia hacia ese otro ser, en cuyo caso terminará por tolerar situaciones de desigualdad y muy poco felices que nada tienen que ver con el vínculo real de una pareja. Así puede llegar a pensar que no importa que se la maltrate, se la desprestigie o desvalorice, por el simple hecho de ‘estar en pareja’”, argumenta la psiquiatra.
Carla tiene 39 años y es empleada en una farmacia céntrica. Desde su experiencia "estar sola es difícil, no sólo para las que deseamos estar en pareja sino porque, además, se suma todo un sistema sociocultural que pone mucho peso en las mujeres, si a determinada edad no tenés un hombre a tu lado. En mi caso fue duro, pero preferí estar sola a 'sentirme sola' teniendo a alguien al lado, con el que no tenía nada que ver en ningún sentido".
¿Por qué razón mientras hay hombres y mujeres que deciden no mentirse aunque estén solos, por otro lado hay personas que deciden lo opuesto?
“Hay varios aspectos que van desde la crianza que se tuvo de pequeños, la falta total de autoestima, hasta los prejuicios más variados que hacen que, de cara a la sociedad, una persona elija ese ‘estar en pareja’, aunque el vínculo esté vacío”, aclara Prats.
Sin embargo, para muchos elegir “estar solos” es una decisión que los hace profundamente felices, y con la que conviven más allá de cualquier prejuicio.
Celeste tiene 41 años, es docente y, luego de tener varias relaciones (con convivencia incluida) decidió que su estado más pleno es la soltería: "Salgo, me divierto y conozco gente pero no necesito a otra persona para sentirme plena o feliz", apunta.
“Tuve convivencias diversas que me dejaron la seguridad de que hoy elijo mis espacios propios y mis tiempos. Mi elección no se basa en miedos ni en rencores con el sexo opuesto, ni mucho menos en ‘evitar sufrir’. Quizá en un futuro pueda cambiar de parecer o no, no me cambia en nada. Lo mejor de todo es que lo que opine la gente dejó de interesarme hace rato, cuando decidí ocuparme de mí”.
Si de géneros se trata la psiquiatra destaca: “En la actualidad hay un montón de mujeres y hombres que deciden estar solos y no les molesta. Quizá lo bueno es preguntarse por qué lo eligen...Es decir ¿porque es cómodo? ¿Porque se evitan sufrir o bancarse lo que no les gusta del otro? Allí radica el tema: que lo que se decida sea por una razón válida y enriquecedora para la persona en sí”.
¿Seremos las mujeres más complejas para escucharnos y desestimar mandatos sociales que nos hacen soportar “chaperones deslucidos”?
Según Prats, “ellos en general cuando se comprometen en una relación son más estables y prácticos. Si están comprometidos es porque quieren y no por mantener una situación de seguridad. Algunas mujeres por ahí sí tienen esa dependencia. Todo depende de lo que cada uno quiere priorizar para su vida. Es decir si puede sostener diferencias, porque lo que prevalece es algo fuerte con la pareja o por el ‘qué dirán’, o una falta total de autoestima”.
Por otro lado, el estar en pareja por sentimientos y fortalezas muchos más fuertes que cualquier desencuentro normal, también tiene que ver con una elección enriquecedora.
"Hace 10 años que estoy en pareja y no fue sencillo porque estaba negada por otras relaciones anteriores que no funcionaron", cuenta Sabrina, una contadora de 38 años. Sin embargo, a pesar de diversas crisis y roces de cada etapa, siempre supe que valía la pena todo lo que nos unía y el amor que nos permitía y nos permite seguir eligiéndonos. Fue y es un aprendizaje constante en el que me siento plena y siento lo mismo desde el otro lado".
Algunas pautas para re preguntarse
Según explica la psicóloga bonaerense Beatriz Goldberg (especialista en crisis de pareja, autora de "Cómo encontrar pareja y no morir en el intento) "siempre es positivo re preguntarse y responderse a uno mismo, teniendo siempre, como premisa, el escucharse".
- ¿Qué debería repreguntarse una persona para saber si está realmente con alguien por la importancia de ese vínculo, o no?
“Tiene que saber escucharse y detectar si le afecta el ‘qué dirán’ o el hecho de que todos sus amigos y familiares estén en pareja, y ella o él no. También debe poder analizar si a la hora de enfrentar situaciones de la vida, necesita de un otro por soledad y no porque en realidad tiene un vínculo sólido más allá de los roces o asperezas de cualquier pareja.
- ¿En qué aspecto de este análisis se tiene que hacer especial hincapié?
- En el hecho de no renunciar a algo importante para la persona y que no puede ser negociable. Por ejemplo si para la pareja la fidelidad no se negocia, y es un gran valor, ir en contra de eso no es bueno ni justo para quien lo padece.
Muchos hombres y mujeres terminan solos, pero “acompañados” por parejas con las que nada los une, a causa de una mala autoestima, temores diversos y hasta como salvataje económico.
En realidad lo importante es generar el propio GPS interno para saber qué se quiere, cómo se quiere y en qué momento, para no boicotearse.
La fidelidad a uno mismo es lo mejor para estar y desarrollarse con una pareja, cuyo vínculo es fuerte y crece, ya sea para elegirla todos los días o para no resignarnos a nosotros mismos, si sentimos que lo importante no funciona.