“Una Selección distinta que necesitará como nunca jugar en equipo”. Argentina hizo valer al pie de la letra esa identidad que la ubicó en lo alto del básquetbol mundial. Porque a este deporte se juega en equipo y de nada sirve el brillo individual antes que el colectivo.
Debían aparecer varias vías de gol para sacar adelante el debut ante Puerto Rico y vaya si aparecieron. Con una notable producción erigida en el tercer cuarto, ganado por 24-11 y que permitió llegar al último período con 20 puntos de ventaja, Argentina ganó 98-75 en Sevilla y hoy, a las 8.30 de nuestro país, se enfrenta con Croacia.
Se puede hablar del brillo de Nocioni, que parece intacto y ofrece su coraje y, ayer, 18 puntos. Se puede hablar del destape del zurdo Safar, clave en el segundo cuarto, autor de otros 18 tantos.
Se puede hablar de Herrmann, de Scola, de... pero hay que hablar del equipo, que se debía un rendimiento así. Y llegó en el momento justo.
Fueron dos cuartos bien diferentes los que le permitieron a El Alma Argentina ganar el primer tiempo 45-38. Si los 10’ iniciales lucieron mejor de lo esperado, con goleo abierto y repartido, aunque dominado por la enjundia de Chapu, en el segundo período la Selección trabajó más cada posesión.
Era lógico: la puntería no dura siempre y entonces apareció la defensa. Y Puerto Rico lastimó con penetraciones y algún que otro triple. Así y todo, Argentina se las arregló para quedarse con la mitad: 45-38.
En Real Madrid se frotaban los ojos viendo el partido que se jugaba en Sevilla. ¿Nocioni de ayer es el mismo de antes y no cambió con el paso del tiempo? El santafesino ardió en el cuarto inicial, con 10 puntos (3-3 dobles, 1-3 triples y 1-2 libres), 5 rebotes y una tapa.
A su lado, Herrmann ofrecía su habitual traslado de pelota y sumaba 7 tantos, con 4 rebotes. Ofensivamente, Argentina era un relojito y eso generó que Puerto Rico se cargara de faltas. En 3’14’’, la Selección construyó una racha de 11-1 para sacar la máxima, hasta allí, del encuentro: 23-10 a falta de 2’26’’.
Claro que la contracara fueron las faltas de Campazzo y Prigioni, que asustaban porque Arroyo y Barea son las cartas goleadoras de los boricuas.
Argentina llegó al segundo cuarto 27-19, sin el goleo de Scola, y entonces la rotación se hizo por lógica obligación física y de cambio de aire. Para colmo, Prigioni sumó tres faltas y se sentó hasta el final del PT. Balkman, que había estado en duda, con un robo y una volcada acercó 30-26 a los caribeños.
Con Campazzo, Safar, Mata, Leo Gutiérrez y Scola, Argentina era una versión nacional de lo que mostró Peñarol (MdP). Salvo el capitán, los demás le dieron lustre a las copas de la Liga Nacional. Y si Argentina aguantó la embestida y fue porque Safar llegó a los 12 puntos en 13’30’’.
Luego caribeños quedaron a cuatro: 40-36 con un triple de Galindo y dos libres de Barea, pero fue Safar el responsable de encestar un triple para el 45-38 que dejó aire para irse al descanso reparador. Quedaban 20 minutos.
Si alguien hubiera dicho que a los 6’35’’ del tercer cuarto Argentina estaría ganando 61-46, con una falta antideportiva por tirar, lo habrían tratado de loco. Demente sin remedio. Pero así fue nomás.
La Selección, impulsada por los triples repartidos y por la polenta de Nocioni, sacó 15 puntos e hizo delirar a los hinchas en Sevilla. La racha se extendió como la marea en plenitud y Argentina llegó al último parcial ganando 69-49.
El último cuarto estuvo de más por lo construido en el tercero. Hubo, sí, tiempo para no aflojar ante un eventual desempate. Y hubo lujos de Scola y de Prigioni, que sacaron de quicio a Barea, quien sueña con Argentina desde que erró aquel triple final en Mar del Plata, para que la Selección llegara a Londres 2012. Hubo fiesta en la cancha y en las tribunas en Sevilla.
Julio César Lamas: "Jugamos con el corazón"
El seleccionador Julio Lamas, expresó que una de las claves del triunfo conseguido ayer ante Puerto Rico por la primera fecha del campeonato Mundial de España fue haber jugado todo el partido “con el corazón”.
“Jugamos los cuarenta minutos con el corazón. La intensidad defensiva y en la lucha por los rebotes también fueron claves para el triunfo”, puntualizó Lamas.
El entrenador argentino destacó en diálogo con TyC Sports como otros de los puntos destacados de el encuentro que “es muy importante empezar ganando ante un rival directo porque aumenta la confianza con miras a lo que se viene”.
Cuando se lo consultó sobre el partido de hoy contra los croatas, que ayer derrotó a Filipinas en tiempo suplementario, Lamas indicó que “esperamos un partido mucho más complicado. Es un equipo de mucho nivel, con mucho talento y altura. Será difícil y habrá que trabajarlo con mucha concentración”.
Los análisis de Scola y Prigioni
El capitán del Seleccionado argentino, Luis Scola, expresó que el equipo jugó: “Con la mentalidad con la que hay que jugar este tipo de partidos. Si jugás de esa manera, con intensidad, las cosas te salen bien. Los tiros salen fácil, la pelota entra”.
El ala pivot indicó además: “Defendimos bien las cosas que ellos proponían y supimos aprovechar que (José) Barea no jugó de entrada, y el momento en el que sacamos 10 o 12 puntos de ventaja. La diferencia (23 puntos) no es la real entre ambos equipos. Hicimos un tremendo partido y ellos no estuvieron bien atrás”.
Cuando se le preguntó por el encuentro de hoy ante Croacia, Scola, quien fue el goleador argentino ante Puerto Rico, indicó que “es otro tipo de partido al jugado hoy (por ayer). Como todo seleccionado europeo es un equipo más duro, más áspero, y sus jugadores tienen más experiencia. Va a ser difícil sacar diferencias con un equipo así”.
"Si jugamos con la misma actitud con que lo hicimos en el debut van a pasar cosas buenas. La clave está en repetirlo ante Croacia", puntualizó Scola.
Por su parte, Pablo Prigioni afirmó: "Veníamos con malas sensaciones por los últimos partidos de preparación.
Eso nos hizo entrar con el cu... (sic) bien apretado. Tuvimos un gran arranque y nos dio confianza. Cada uno aportó cosas para el equipo”. A lo que agregó: “No creo que haya veinte puntos de diferencia ante este equipo de Puerto Rico. Hay que disfrutarlo, pero en su justa medida”.
Con respecto a Croacia, rival que hoy enfrentarán por la segunda fecha de la fase de grupos, el base de los New York Knicks explicó que será “muy complicado. Para mi es el mejor del grupo. Veremos si somos capaces de ponerlos en problemas. Intentaremos llevarlos a una situación límite para poder ganar el partido”, señaló.
En relación a los puntos altos que tuvo el combinado albiceleste, el cordobés destacó “la defensa, el corazón y las ganas”. “Defendimos bien y dominamos el juego, no le permitimos hacer su juego”.
Afuera también fue una fiesta
Argentina repitió ayer esa vieja costumbre de enamorar desde la cancha a la tribuna con el espectacular triunfo 98-75 que consiguió sobre Puerto Rico.
Más de tres mil aficionados argentinos, ataviados con camisetas y portando banderas celestes y blancas (además de otros que lucieron casacas de distintos clubes), deliraron hasta el cierre con una actuación que no tuvo fisuras, de principio a fin.
Los simpatizantes, llegados desde diferentes puntos de nuestro país, España y Europa, enarbolaron ese comportamiento que distingue a todo público victorioso: alentar hasta el final, agitar remeras por sobre las cabezas y dar cuenta, a viva voz, de ese canto que expresa que “... es un sentimiento, no puedo parar”.