El año 2016 fue un año lúgubre para el clima con nuevos récords de temperatura y aumento sin precedentes del nivel de los océanos y de las emisiones de gases de efecto invernadero, según un informe anual sobre el “estado del clima”.
Las contribuciones de cerca de 500 científicos de más de 60 países, contenidas en el informe, muestran que el planeta continúa calentándose sin dar signos de desaceleración. Varios indicadores clave, como las temperaturas en la superficie de la Tierra, el nivel de los océanos y la emisión de gases de efecto invernadero en la atmósfera, han superado los niveles récords que ya se habían alcanzado en 2015.
“Los récords de calor del año pasado son producto de la influencia combinada de las tendencias del calentamiento global a largo plazo y un fuerte El Niño a principios del año”, explica el informe de la Administración Oceánica y Atmosférica de EEUU (NOAA) y la Sociedad Meteorológica Estadounidense (AMS).
En 2016, las concentraciones de dióxido de carbono (CO2) alcanzaron 402,9 partes por millón (ppm), superando por primera vez las 400 ppm en la historia moderna y en los relevamientos de glaciares que datan de hasta 800.000 años.
Olas de calor excepcionales golpearon México e India. En el norte y el este de la península india, los termómetros llegaron en abril de 2016 a marcar 44ºC, provocando más de 300 muertes y una escasez de agua que afectó a 330 millones de personas.
En el Ártico, la región más sensible al calentamiento, la extensión máxima de hielos fue la más baja en 37 años de observaciones satelitales. Y en la Antártida fue también inferior al promedio del periodo 1981-2010. El derretimiento de los hielos marinos y los casquetes polares elevó el nivel del mar a un nuevo récord, 82 milímetros por encima de la media registrada en 1993.
“El cambio climático es uno de los problemas más acuciantes de la humanidad y la vida sobre la Tierra”, dicen los autores del informe.