El presidente de Egipto, Abdel Fatá al Sisi, inaugurará solemnemente mañana una segunda vía en el canal de Suez, un proyecto simbólico con el quiere relanzar la frágil economía del país y asentar su autoridad a nivel internacional.
La inauguración, con el presidente francés François Hollande como invitado de honor y con la presencia de varios jefes de Estado, se celebrará en Ismailía (noreste), junto al canal.
La ceremonia coincide con el primer aniversario de la llegada al poder de Sisi tras derrocar al presidente islamista Mohamed Mursi y reprimir duramente a sus partidarios.
La expansión del canal es uno de los proyectos estrella de Sisi, que prometió durante la campaña electoral relanzar la economía y restablecer la seguridad en el país.
La nueva vía, de 72 km, permitirá multiplicar por dos el tráfico en este arteria que une el mar Rojo con el Mediterráneo.
Hacia 2023, 97 navíos diarios, frente a los 49 actuales, podrán transitar por la vía acuática, según la administración del canal.
La nueva traza permitirá circular en ambos sentidos, reduciendo así de 18 a 11 horas el tiempo de espera para los barcos.
El canal, inaugurado en 1869, es una de la vías navegables con más tráfico del mundo y un lugar de paso clave para el comercio internacional.
Con la inauguración de la nueva vía, se prevé que los ingresos del canal pasen de los 5.300 millones de dólares previstos en 2015 a 13.200 millones de dólares en 2023.
Egipto está intentado convertirse en un actor ineludible en la región. Al mismo tiempo los países occidentales han moderado sus críticas a la represión de la oposición, que hasta ahora ha dejado al menos 1.400 muertos.
En la inauguración, el presidente Sisi encabezará un desfile naval a bordo de un yate que perteneció a la familia real y se celebrará también un desfile aéreo con tres aviones de combate Rafale y ocho F-16, comprados recientemente a Francia y EEUU.
Egipto también quiere convertir la zona que bordea el canal en una plataforma industrial y comercial con varios puertos y un centro de servicios para las flotas comerciales, un proyecto que podría crear más de un millón de puestos de trabajo en los próximos 15 años. Las obras de la nueva vía empezaron el 5 de agosto de 2014 y movilizaron U$S 9.000 millones.