"Yo le doy fuerte hasta que se rompa. Alguna vez tengo que ganar". Lo ha dicho siempre, aún cuando hay que decir basta mucho antes de perder. Los costos millonarios requieren insatisfacciones. Hay que sacrificar. No se puede salir a fundir o a ganar. José Manzano (38 años -alvearense- casado) luego de un largo retiro de las pistas, volvió con la misma fueza, el mismo temperamento y largó para ganar o fundir.
La ciudad de Salto, luego de la victoria, lo recibió como un gran campeón. Tras unas temporadas de fracaso, Manzano había pronosticado otra vez su triunfo, ahora con un Torino y ha ganado.