Si bien son varios los jugadores de voley mendocino que pasaron en distintas épocas por la Selección argentina, Leandro Concina es el primero que tendrá la chance de jugar un Mundial (Japón) de la máxima categoría.
El ex atacante de Regatas, que actualmente juega en Boca, fue convocado por el entrenador Jon Uriarte tras la gira amistosa post Liga Mundial 2006.
Quien jugó un Mundial, pero en la categoría de juveniles, fue Marcelo Palomino, otro ex Lago, en 1986. Concina llevará la camiseta N° 8 y ocupará el puesto de receptor punta.
“Uriarte dice que tengo que entrar y jugar, nada más. No pensar en otra cosa. Considero que hay partidos en los que podré aportar mi juego al equipo. Esto, para mí no deja de ser un sueño”, dijo antes de viajar.