Una mujer policía de Tulsa, Oklahoma, acusada de homicidio en primer grado por matar de un disparo a un hombre negro desarmado la semana pasada se entregó hoy a las autoridades.
Los registros de la cárcel del condado de Tulsa mostraron que Betty Shelby, de 42 años, se entregó a las autoridades en la madrugada del viernes, horas después de que la fiscalía la acusó de homicidio agravado por la muerte de Terence Crutcher.
Según los documentos, Shelby, que es blanca, llegó a la institución a la 01:11 de la madrugada y quedó en libertad 20 minutos más tarde, a la 01:31, tras abonar una fianza de 50.000 dólares.
El fiscal federal en el condado Tulsa, Steve Kunzweiler, presentó los cargos contra la agente el jueves por la tarde alegando que "reaccionó injustificadamente'' cuando el 16 de septiembre le disparó a Crutcher, de 40 años, quien no iba armado.
Un abogado de defensa, Phil Turner, quien reside en Chicago y es un exfiscal federal, dice que al haber actuado con rapidez, los fiscales pueden -en parte- haber querido disipar el descontento social en la ciudad y evitar el tipo de protestas violentas como las que han ocurrido en Charlotte, North Carolina, donde hubo otro tiroteo policial reciente contra un hombre negro.
Betty Shelby está acusada por la muerte del afroamericano Terence Crutcher, de 40 años, que ocurrió el 16 de septiembre. Los hechos quedaron registrados en dos videos que fueron difundidos el lunes y en los que las imágenes muestran a la víctima que camina hacia su camioneta, descompuesta y cruzada en una ruta, con los brazos en alto, de espaldas a varios agentes de policía.
En la grabación se ve que uno de los oficiales lo paraliza con una pistola eléctrica y otro le dispara: en las imágenes se observa que ninguno intenta asistir al hombre baleado.
Los agentes habían acudido a la ruta tras recibir llamadas que los alertaban sobre un vehículo abandonado que impedía el paso.
Por su parte, Betty Shelby argumentó que el hombre ignoró sus indicaciones en varias ocasiones, mientras que su abogado dijo que los videos no muestran todo lo que ocurrió, ya que la confrontación con Crutcher comenzó un poco antes de que se comenzara a grabar, según consignó DPA.
Según Shelby, el hombre se tocaba los bolsillos e intentó tomar algo del interior del vehículo cuando los policías se acercaron.
La muerte de Crutcher se inscribe en una serie de muertes de hombres afronorteamericanos desarmados provocadas por la violencia policial y el gatillo fácil.
Solamente en lo que va de 2016, la Policía en Estados Unidos mató a 707 personas, 174 de ellas afronorteamericanas, según un recuento del diario The Washington Post, es decir un 24% de las víctimas, casi el doble de su peso real en la población estadounidense (13%).