Miles de personas manifestaron este sábado en Washington, apoyadas por el ministro de Educación y legisladores, en favor de un endurecimiento de las leyes sobre tenencia de armas de fuego, seis semanas después de
la matanza de la escuela de Newtown
, que marcó un punto de inflexión en este tema.
Los manifestantes, que se congregaron luego en el corazón de Washington, en las cercanías del Capitolio y la Casa Blanca, pidieron al Congreso y al gobierno de Barack Obama que actúen "desde ahora para controlar" la tenencia de armas y "frenar a la NRA", la National Rifle Association, el todopoderoso lobby armamentista.
"Tenemos que actuar, actuar y actuar y dejar de hablar. En nombre del presidente Barack Obama y del vicepresidente (Joe Biden) haremos todo lo que esté en nuestro poder para adoptar una legislación que refuerce la seguridad de nuestros niños, de nuestras familias y de nuestras comunidades", proclamó el secretario de Educación Arne Duncan.
Duncan dijo a la multitud que cuando estaba a la cabeza de la red de escuelas públicas de Chicago, en los años 1990 y 2000, "cada dos semanas se enterraba a un niño víctima de un arma de fuego".
"Esto debe cambiar (...), nuestro país se lo merece", declaró el secretario, muy aplaudido por las miles de personas que habían desfilado durante media hora, en medio de un frío polar y en silencio, con pancartas blancas que sólo lucían el nombre de algún familiar muerto por balas.
"Mis hijos son más importantes que vuestras armas", decía otra pancarta. Unas 270 millones de armas están en poder de los estadounidenses, es decir una media de 88,8 cada 100 habitantes. En 2011, 32.163 personas murieron por armas de fuego, 10,3 cada 100.000 habitantes.
Una de las manifestantes, Adrienne Leff, contó cómo su cuñado fue "asesinado de 11 balazos" la víspera de Navidad en Washington simplemente porque sus agresores "querían su billetera". "No tenían razones para llevar las armas que llevaban", dijo.
El alcalde de la capital estadounidense, Vincent Gray, ferviente partidario de una legislación sobre la tenencia de armas, reclamó en el acto público que "se haga algo para que todo el mundo esté protegido de esos irresponsables e irracionales que atraviesan las ciudades de nuestros estados munidos de armas a las cuales no deberían tener acceso".
A mediados de enero, tras la masacre del 14 de diciembre en una escuela de Newtown (Connecticut, noreste), que costó la vida a 20 niños y seis adultos, el presidente Obama firmó 23 decretos y propuso al Congreso medidas para luchar contra la violencia generada por las armas de fuego.
El jefe de Estado encargó al vicepresidente Biden asumir el seguimiento de este tema políticamente muy sensible.
Los demócratas lanzaron el jueves una campaña para endurecer la legislación sobre tenencia de armas de fuego, en particular de fusiles semiautomáticos.