La Reserva Federal de Estados Unidos anunció el miércoles su primer aumento en nueve años de la tasa de interés, un paso de impacto global que señala que Estados Unidos dejó atrás su crisis de 2008.
La Fed indicó que futuros aumentos a las tasas probablemente serán graduales a medida que se fortalece la economía y aumenta la inflación desde niveles indeseablemente bajos.
El banco central dijo en un comunicado tras su última reunión que estaba elevando su tasa de referencia en un cuarto de punto a una banda de entre 0,25% y 0,5%. Esta medida pone fin a un período extraordinario de siete años con tasas casi en cero.
La decisión era esperada en todo el mundo desde que Estados Unidos confirmó que crece lenta pero sostenidamente y fue recibida con serenidad en los mercados.
`La decisión de hoy de la Fed refleja nuestra confianza en la economía de Estados Unidos'', dijo Janet Yellen, presidenta del banco central, en una conferencia de prensa.
El mercado de bonos prácticamente no reaccionó. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años se mantuvo en 2,28%, un cambio menor respecto a la mañana.
Wall Street cerró con su índice Dow Jones en alza de 1,28 y el Nasdaq ganó 1,52%. Las bolsas latinoamericanas cerraron en alza, salvo la de Buenos Aires que perdió 2,20% cuando el nuevo gobierno gobierno se disponía a anunciar el fin de las restricciones al mercado de cambios.
El dólar, beneficiario directo de la suba de las tasas, solo se apreció levemente ante el euro. Y en los países latinoamericanos no hubo variaciones bruscas de las monedas.
Impacto global
Aunque se aplican básicamente para préstamos interbancarios de muy corto plazo, la tasa directriz estadounidense sirve de base para las de plazos mayores en todo el sistema financiero.
Aumentarla significa incrementar los costos para los créditos en dólares que toman gobiernos, compañías y consumidores. Al mismo tiempo asegura ganancias mayores a los depositantes bancarios.
Para los países emergentes, varios de ellos con serios problemas como Brasil, puede cerrar casi una década de bonanza gracias al dolar barato. Los capitales que se refugiaban allí en busca de un rendimiento mejor pueden ahora orientarse hacia el billete verde acentuando los problemas actuales.
Jim O'Sullivan, economista jefe de High Frequiency Economics, estimó que las tasas subirán a mayor velocidad de lo que sugirió la Fed este miércoles.
“Seguimos escépticos en cuanto a que el ritmo de aumento será tan gradual como se sugirió, especialmente porque creemos que seguirá cayendo la tasa de desempleo y eventualmente eso puede agregar presión sobre la inflación”, dijo.