Auspiciosa ha resultado la recuperación de la estación Paso de los Andes del antiguo Tren Trasandino, en Chacras de Coria, por parte de la Municipalidad de Luján de Cuyo y con destino a su uso comunitario. En esa gestión actuaron mancomunadamente el municipio y la asociación Civil “El Andén”, integrada por vecinos, algunos de ellos hijos de ex ferroviarios.
Debieron transcurrir 16 años para que volviera a disponerse de las instalaciones ubicadas al fondo de la calle Mitre, en el sector Oeste del radio céntrico de Chacras de Coria, tras desalojar y reubicar a las familias que ocupaban el complejo.
Ahora se aguarda el desarrollo de un proyecto de conservación, puesta en valor y planificación del destino que se dará a la estación que, afortunadamente, conserva el estilo tradicional inglés de construcción, con sus 40 m de largo y 20 m de ancho, y luce un andén cubierto por una solera de madera y chapa con detalles que aún conservan cierta elegancia.
Se habla de una utilización sustentable del sitio, lejos de negocios inmobiliarios o gastronómicos que pudieran contraponerse a las intenciones de los habitantes del distrito.
A lo sumo, materializar un espacio temático en armonía con la preservación del patrimonio cultural y forestal del área.
El investigador ferroviario, Julio César Del Monte, pondera como un logro que el bien haya vuelto al dominio de los vecinos con una administración municipal, y recuerda que el lugar acredita antecedentes culturales de relevancia, ya que allí se filmaron películas y por lo menos un documental (sobre Mauricio López, el pensador desaparecido en el gobierno de facto de 1976-83), y además supo albergar festejos y eventos populares, como por ejemplo el desplazamiento de un mini tren, antes de la pandemia (agosto de 2019), entre General Gutiérrez y Paso de los Andes, que fue todo un suceso.
Ya que nos estamos refiriendo a lo ocurrido con un patrimonio de Luján de Cuyo tomamos, como promesa a cumplir, las palabras del presidente del Concejo Deliberante, Andrés Sconfienza, quien remarcó que no se van a permitir más usurpaciones tras la recuperación del establecimiento de calle Mitre.
Tal vez el municipio piense adoptar acciones similares, por ejemplo, en la vieja estación de Mayor Drummond, de calles Alberti y Guiñazú, de la localidad del mismo nombre y que eventualmente tendría que ser desocupada si se concreta la extensión del Metrotranvía a Luján de Cuyo. Las personas que allí habitan lo hacen desde hace mucho tiempo y deberían ser reubicadas como ocurrió con los ocupantes de la estación Paso de los Andes.
En el plano de las buenas intenciones también se podría estudiar la situación del Museo Ferroviario Alejandrino Alfonso que, con tanto sacrificio y empeño, levantó y mantuvo abierto Néstor Antonio Flores, el ex jefe de la estación Blanco Encalada, de la línea del Trasandino, en Las Compuertas.
Entonces, todos estos movimientos tendientes a recuperar patrimonios perdidos o en mal estado, como hicieron la comuna de Luján y los particulares, bien pueden ser imitados en los restantes departamentos de la provincia y con ese proceder seguramente aparecerían más lugares simpáticos para rescatar, preservar y poner al disfrute de los ciudadanos.
