El 10 de marzo de 1993 se considera el día de la extinción de los trenes de pasajeros entre Mendoza y Buenos Aires.
Fue una jornada triste. A las 17.06 partía de la estación Mendoza del Ferrocarril San Martín, una formación de El Cuyano, tirada por una locomotora Alco-RSD-16, N° 8488, con aproximadamente 360 pasajeros.
El Cuyano había surgido como “tren social” y en tal sentido como última alternativa de conexión ferroviaria entre Mendoza y la estación de Retiro, a raíz de la suspensión de servicios como el Aconcagua, El Cóndor, El Sanjuanino y El Libertador, dispuesta por el entonces Gobierno nacional.
El proyecto de desmantelamiento del sistema ferroviario del interior del país, había comenzado antes, en 1991, cuando el Ejecutivo dispuso parar los servicios de pasajeros de mediano y largo recorrido, en las seis líneas troncales que en esos tiempos tenía la empresa Ferrocarriles Argentinos.
El tiempo pasó, muchas veces entre los ‘90 y la actualidad se habló de recuperar los trenes de larga distancia, que para muchos argentinos es algo que sólo han visto por televisión, el cine o experimentándolo si han viajado a Europa, Estados Unidos u otros lugares, donde esta forma de trasladarse está plenamente vigente.
La introducción viene a cuento porque un tren de prueba de la empresa Trenes Argentinos arribó el miércoles 25 de junio a la localidad de Justo Daract, a 140 km de la capital de San Luis, con el fin de reactivar el servicio de pasajeros con destino a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a casi 30 años de su cancelación.
Se trató de una travesía experimental, reservada a técnicos y mecánicos para relevar todo el sistema de vías de la formación perteneciente al ramal San Martín. El convoy recorrió los más 632 kilómetros que unen la estación de Retiro con la localidad puntana en 14 horas.
La travesía permitió advertir que en algunos sectores, las vías no estaban en condiciones para desarrollar una velocidad más amplia, por lo que en las próximas semanas esas fallas se irán corrigiendo para luego librar el servicio al uso público.
Cuando se habilite el recorrido, que será en los próximos meses, la formación saldrá de Retiro el viernes por la tarde y llegará los sábados al mediodía a Justo Daract. El regresó a Retiro será los domingos a las 17 y el costo del pasaje rondaría los 700 pesos.
A los mendocinos nos interesa la extensión del servicio hasta Mendoza, lo que, según los especialistas en el tema, es bien posible. La alternativa es que los trenes lleguen, aprovechando la trocha ancha (1.676 mm) disponible, a la estación mutimodal de General Gutiérrez (Maipú), que tiene ingreso para ómnibus, playa de estacionamiento para alrededor de cien automotores y oficia como terminal del Metrotranvía de Mendoza, sistema de tren ligero para el Gran Mendoza, próximo a ser ampliado.
El recorrido a Mendoza no será por la conexión Villa Mercedes-Ciudad de San Luis, sino que se utilizará el ramal Justo Daract-Beazley-La Paz, también conocido como Vía Beazley.
Hoy se encuentra en funcionamiento la vía de cargas de la línea General San Martín con destino a Rosario y Buenos Aires, pero se trata de otro tipo de infraestructura para que conviva con la modalidad de pasajeros.
El recorrido estará oficialmente en operación en el bimestre julio-agosto y esto marca un precedente para que se replique la situación en Mendoza antes de fin de año. ¿Será posible?