La titular del Sindicato de Docentes de Escuelas privadas (Sadop), María Elina Scot, indicó que fue una buena medida la de pasar el borrador del protocolo a las escuelas privadas y públicas.
"El protocolo salió con consenso de todo el Consejo de Educación y fue a raíz de la intervención del SUTE y de Sadop que se bajó a las escuelas, por lo que es algo que celebramos. Sin embargo nos parece que en el primer borrador ha quedado afuera todo lo que tiene que ver con la violencia simbólica y algunos casos menores, aunque no menos importante. Se incluyen algunas cosas que no son frecuentes en escuelas de Mendoza, como chicos que van con armas a clases, pero se deja afuera la posibilidad de democratizar las escuelas. Hay que trabajar para fomentar la paz, no centrarnos en la violencia", sentenció Scot.
Desde el SUTE, por su parte, prefirieron no emitir una opinión hasta que analizaran el tema internamente. Hoy darán una conferencia de prensa al respecto.
Pero los ecos del protocolo contra la violencia escolar llegaron también a la Legislatura. Allí, el senador Armando Camerucci (UCR) reiteró su pedido de creación de una Junta de Seguridad Escolar, compuesta por psicopedagogos, psicólogos, especialistas en violencia escolar y personal del área legal de la DGE, que se ocupe de "las conductas de maltrato, intimidación, agresión o violencia entre niñas, niños y adolescentes, en establecimientos educacionales o en los trayectos o momentos inmediatamente anteriores al ingreso o posteriores al egreso de los mismos".