Con el último día hábil de noviembre acercándose, y siendo el último plazo para registrar autos cero kilómetro, este viernes se oficializó que Toyota Argentina ha decidido reducir los precios de sus vehículos a partir del lunes siguiente. Esta medida se enmarca en la eliminación del impuesto PAIS, prevista para fin de año, lo que implica una disminución del 7,5% en los costos de importación.
Aunque todas las automotrices estaban evaluando sus opciones, Toyota, líder en ventas tanto en el mercado local como en el de exportación de vehículos, ha adelantado su decisión.
La compañía confirmó que los modelos importados de Brasil, como los Toyota Yaris, Corolla y Corolla Cross, tendrán una rebaja del 3% en sus precios para diciembre. En tanto, los modelos nacionales Toyota Hilux y SW4, que ya cuentan con un mayor porcentaje de autopartes locales, experimentarán una reducción del 1%.
Pocas horas después, Ford Argentina adoptó una medida similar, aunque de manera diferente. Su descuento promedio es del 1%, sin importar la procedencia de los modelos, y está vinculado al posicionamiento en el mercado. Según la marca, aunque el descuento sea del 1%, al absorber un 2% del “crawling peg” (devaluación mensual oficial), el impacto final en los precios de lista será de un 3%.
La decisión del gobierno de eliminar, a partir de fin de noviembre, la percepción del 95% del impuesto PAIS facilitó esta medida, ya que permite que las importaciones de diciembre paguen el impuesto, pero los vehículos vendidos en enero no estarán sujetos a dicho costo, lo que evita una absorción de gastos que no pueda reflejarse en los precios.
La expectativa de los consumidores de poder adquirir un auto cero kilómetro a un precio más bajo en enero que en diciembre, impulsará a muchos a postergar su compra un mes. Esta decisión les permitiría pagar menos y tener un vehículo con un año más de antigüedad en los papeles, lo que puede ser relevante incluso para su futura reventa. No es lo mismo tener un modelo 2024 que un 2025 en cuanto a valor de reventa.
El primer ejecutivo de una terminal automotriz en hablar sobre este tema fue Martín Galdeno, presidente de Ford Argentina, quien en octubre comentó: “Los consumidores tendrán que estar atentos, y nosotros también. Veremos quién mueve los precios, quién se anticipa, quién no. Todos estamos evaluando nuestras estrategias y considerando cuándo nos conviene ajustar los precios. Tal vez lo hagamos en enero, pero quizá decidamos hacerlo en diciembre.”
Recientemente, durante un evento de cierre de año, el presidente de Toyota Argentina, Gustavo Salinas, explicó que “este tipo de medidas gubernamentales, como la eliminación de impuestos, deben reflejarse en los precios. Y esa es también nuestra política. Sin embargo, reducir un impuesto del 7,5% no implica que esa reducción sea directa sobre el precio de los autos.
Hay dos aspectos a considerar: si la inflación fue del 2,5% en el mes, el impacto no es el 7,5%, sino del 5%. Además, el impuesto PAIS solo se aplica a las importaciones y a lo que se paga en dólares, pero no representa el 100% del precio del vehículo. De hecho, cuando se implementó el impuesto PAIS, nosotros no lo aplicamos al total del precio del vehículo, sino solo a la parte que correspondía.”
Con esta explicación, se entiende por qué, a pesar de una reducción del 7,5% en los impuestos sobre las importaciones de autos y autopartes, el impacto que decidió Toyota Argentina fue del 3% para los vehículos provenientes de Brasil y del 1% para los de fabricación nacional en Zárate.
Por otro lado, las últimas mediciones de ventas muestran que los resultados de noviembre están lejos de las expectativas de los fabricantes. Aunque las cifras podrían cerrar con un leve incremento respecto a noviembre de 2023, los objetivos de crecimiento cercanos al 8% parecen inalcanzables.
Las marcas han observado que, si en noviembre, un mes estacionalmente de baja en comparación con octubre, no se alcanzó el mínimo esperado, y dado que diciembre suele registrar una caída de entre el 40% y el 50% respecto a noviembre debido al comportamiento de los consumidores, la eliminación del impuesto PAIS podría empeorar aún más la situación, llevando las operaciones a una nueva caída y alentando a los compradores a esperar hasta enero de 2025.
“Seguramente todos tomemos acciones en diciembre, sí. Porque no le sirve a nadie que no se vendan autos y que en enero haya una crecida inusual ante esta medida. El impacto en precios probablemente sea ya en diciembre. Lo definiremos el lunes”, añadió un alto ejecutivo de otra terminal.
