El Banco Mundial publicó un informe titulado “Las trampas de la pobreza en Argentina” en el cual identificó los factores que dificultan bajar el porcentaje de pobreza, que en el primer semestre del 2024 alcanzó el 52,9%.
Por otra parte, la entidad espera que a partir de la baja de la inflación y de la recuperación del salario, en el tercer trimestre el índice de pobreza en el país sea inferior al 50%.
“El análisis estático de incidencia fiscal muestra que Argentina logra una de las reducciones más significativas en desigualdad y pobreza a través de su gasto público, impacto que se debe en mayor medida a su tamaño y no a su progresividad”, explica el texto que plantea la necesidad de una nueva estrategia.
“Entre 2016 y 2023, el periodo más reciente con información comparable, el ingreso real medio per cápita se redujo en 41 % (Gráfico 2). Los ingresos laborales se han reducido en importancia pasando de contribuir 64 % del ingreso total del decil más pobre en 2016, al 58 % en 2023″, explica el texto.
En el mismo periodo de tiempo, las transferencias públicas pasaron del 19 por ciento del total del ingreso del hogar al 27%.
“El establecimiento y la expansión de un sistema de transferencias sociales y de mecanismos de protección social pueden considerarse como la construcción de muros sólidos de una infraestructura para la reducción de la pobreza (...)tal sistema se ha erigido sobre arenas movedizas”, explican.
Según el Banco Mundial, esta dinámica refleja cuatro “trampas de pobreza”
* Desbalance fiscal e inflación
Cuando los precios de bienes de la canasta básica de consumo aumentan a una tasa superior a la del aumento de los precios en general, como ha sucedido en Argentina frecuentemente (Gráfico 4), los pobres se ven más afectados porque la proporción del gasto total de estos hogares en alimentos es mayor.
* Desequilibrios intergeneracionales y geográficos que generan pobreza crónica
La dimensión geográfica muestra que la pobreza se superpone con las escasas oportunidades de empleo productivo y las brechas de acceso a los servicios. El acceso a los servicios y los mercados es sumamente importante, sin embargo, existen limitaciones en el diseño de soluciones de política pues los datos disponibles no permiten el análisis de los patrones y las dinámicas de la pobreza a nivel local.
* Espiral de baja productividad y vulnerabilidad de los ingresos
La principal fuente de ingresos de los hogares pobres proviene de fuentes de trabajo informales, frecuentemente precarias. La mediana del ingreso laboral es más baja para empleos informales y se ha acercado progresivamente a la línea de pobreza desde 2018 debido a las pérdidas de su valor real, incluso para los trabajadores formales.
* Riesgos más frecuentes de choques climáticos y limitada capacidad de invertir en mayor resiliencia
Para la población pobre y vulnerable, los choques climáticos pueden significar pérdidas en sus escasos activos y la erosión de gran parte de los beneficios de asistencia social existentes, empujando a la gente a la pobreza durante años.
