Los precios del petróleo crudo subieron ayer 2%, respaldados por la oferta más ajustada de los grandes productores y en la medida en que se seguían relajando las restricciones de actividad prodictiva global, y a pesar del alza récord en casos de coronavirus.
El precio de referencia internacional Brent ganó u$s 0,89, 2,11%, a u$s 43,08 dólares el barril, mientras que el contrato para agosto del West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI), el más activo del día, subió u$s 0,90, 2,3%, a u$s 40,73 el barril.
Los precios recibieron impulso de un derrumbe en la cantidad de plataformas petroleras en Canadá, un indicador de futuro suministro, que bajaron a un nuevo mínimo la semana pasada.
La reapertura de estados en los Estados Unidos y en otros países alrededor del mundo tras los cierres de empresas y órdenes de mantenerse en casa debido al coronavirus, también ayudó el alza del crudo.
Los contratos tanto del Brent como del WTI habían trepado cerca de 9% la semana pasada, respaldados por una recuperación de la demanda de combustible a nivel mundial, mientras las naciones reanudan su actividad económica tras aliviar sus restricciones. También dio soporte al mercado la perspectiva de un mayor cumplimiento de la OPEP y sus aliados, grupo conocido como OPEP+, con los recortes coordinados de producción.