El año pasado, el paso masivo y obligado por la pandemia al home office y a las clases virtuales produjo un importante crecimiento de la demanda de computadoras, notebooks y tablets. Y, por supuesto, hubo dificultades para abastecer el mercado, ya que no había suficiente stock. Hoy, la compra de equipos ha caído considerablemente, a la vez que los pedidos de reparación han crecido, producto de la crisis económica. Pero algo se mantiene constante: la dificultad para conseguir insumos, que son importados.
Pablo, de AyP Computación, comentó que, si bien hay gente que tiene que seguir actualizando los equipos, las ventas se han reducido a la mitad del nivel que habían alcanzado durante la pandemia. En cambio, retornó la reparación de máquinas, porque el dólar (oficial), que el año pasado estaba en los $60 ahora ha trepado a $100, por lo que las nuevas casi han duplicado su valor en moneda local. Y a esto se suma que los salarios han ido perdiendo capacidad de compra frente a la inflación.
En cuanto a los insumos para las reparaciones, señaló que hace un par de semanas un proveedor de fuentes para PC les informó que al parecer se iban a cerrar las importaciones, para evitar que sigan saliendo dólares del país. De ser así, adelantó, es de esperar que, por el poco stock, los precios aumenten. Y si bien esta es la única firma que les ha comunicado algo, Pablo señaló que las empresas no importan constantemente, por lo que tal vez los avisos se sucedan en los próximos meses.
Martín, de onSite computación, señaló que la situación ha empeorado con respecto al año pasado, por las dificultades en las importaciones y por el valor del dólar, ya que, si bien los precios en esa divisa se han mantenido casi sin modificaciones, para los argentinos cada vez se torna más inaccesible. Y sumó que cada vez están entrando menos equipos e insumos, por lo que los negocios del rubro se las deben rebuscar para sobrevivir. “Se vende lo que hay y sino buscamos marcas alternativas”, lanzó.
Efecto pandemia
A mediados del año pasado, cuando los comercios de electrónica y accesorios para tecnología pudieron volver a abrir –hasta fines de mayo sólo habían podido trabajar con envíos a domilcio-, tuvieron un boom de ventas. No sólo de computadoras, tablets y notebooks, sino también de impresoras, auriculares, cámaras web, mouse y joystick. Es que, con el trabajo desde casa y las clases virtuales, muchos se dieron cuenta de que sus equipos estaban desactualizados o, en el caso de familias de varios integrantes, necesitaban tener mayor cantidad.
Sin embargo, los principales distribuidores del país empezaron a tener quiebre de stock, porque no sabían a qué cotización vender cuando la brecha entre el oficial y el blue comenzó a ampliarse. Por otra parte, el Banco Central estableció requisitos adicionales para la importación, que complicaron la operatoria. Algunos comerciantes locales plantearon que hubieran podido vender más, si hubieran tenido con qué responder a la demanda. Y ya a fines de 2020 las trabas al ingreso de productos importados habían provocado que la oferta disponible fuera aún más restringida.
Trabas a la importación
Miguel Ángel Keim, de Mak Computación, indicó que este año se han agravado los inconvenientes para conseguir repuestos, como procesadores y circuitos integrados, porque todos son importados y no están permitiendo el ingreso al país. En este sentido, planteó que la situación es complicada porque, ante la grave crisis económica, se incrementa el pedido de reparaciones.
El precio de los pocos materiales que están quedando en stock, explicó, se eleva y consideró que es razonable, ya que las empresas proveedoras deben afrontar sus costos –incluido el pago de salarios del personal- con la venta de un número reducido de productos. Por eso, los valores aumentan en dólares, aun cuando muchos se quejan porque no debería haber modificaciones en esa moneda. También añadió que están entrado “en cuenta gotas” los equipos nuevos y los remanentes que les quedan a los importadores están más caros.
Keim recordó que, en el pasado, ya ha habido trabas para las importaciones y que, a partir de 2015 el sistema se había regularizado, pero ahora se volvió a complicar. Y resaltó que es muy importante que puedan ingresar estos productos, que no se fabrican en el país, para que los profesionales y empresas accedan a equipos de alta gama, en un contexto en que la tecnología se renueva constantemente. Además, la aparición de nuevas propuestas reduce el precio de los modelos más viejos. Por otra parte, las empresas pueden implementar desarrollos que les permiten mejorar su producción y reducir costos.
Desde la Cámara Argentina de Distribuidores Mayoristas de Informática, Productores y Afines han manifestado que el principal problema que existe en el sector es el aprovisionamiento y que existen faltantes de componentes en el mundo y eso afecta a la producción de toda clase de equipos. Adicionalmente, plantean que existe un problema logístico de encarecimiento de fletes, tanto aéreos como marítimos, disminución de frecuencias y demoras en puertos, que prolongan los tiempos de entrega.
Más demanda de software
En cambio, Silvio Montani, de Mas computación, consideró que la provisión de nuevos equipos se ha normalizado con respecto al momento del boom de ventas en 2020, aunque reconoció que las opciones siguen siendo un poco limitadas. Indicó que hubo un problema de procesadores, que no se conseguían, pero que fue a nivel mundial y ya se está solucionando.
Montani señaló que el mercado de venta está bastante tranquilo, pero que se sigue moviendo y que planes como el Ahora 30 ayudan mucho, porque siempre hay un comerciante que tiene que renovar equipos o una familia que necesita una computadora adicional y no es lo mismo desembolsar un monto importante en efectivo o en pocas cuotas, que hacerlo en varias.
Además, este año está vendiendo más software. Así, planteó que el año pasado, hubo muchos que crearon sus páginas web y en 2021 se han dado cuenta de que necesitan un programa que les lleve el stock y que esté vinculado con esa plataforma de ventas, para que se actualice de modo automático la disponibilidad y el precio.