El Gobierno nacional evalúa aplicar un nuevo impuesto a las computadoras importadas en Argentina, lo que podría elevar su valor en un 16%, en una época en la que su consumo y venta ha crecido por el home office y la modalidad virtual de enseñanza.
Como parte de la política de administrar la escasez de dólares, están demorados los permisos para ingresar computadoras y notebooks, por lo que podría haber faltantes en las próximas semanas en medio de un auge en la demanda.
Según adelantó Clarín, el Ministerio de Desarrollo Productivo analiza la posibilidad de aplicar un arancel del 16% al ingreso de equipos terminados, lo que podría afectar principalmente a las marcas internacionales que lideran en el país, como HP, Lenovo y Dell. De concretarse finalmente en marzo, sería un regreso parcial de la promocionada política de “sustitución de importaciones” vigente hasta finales de 2015, cuando las PC importadas tributaban 35%. Desde 2017, no pagan nada.
Fuentes de la industria indicaron que las restricciones para importar impactan a las marcas, mayoristas y cadenas de retail pero de manera desigual. “Las trabas empezaron en noviembre y hay embarques retenidos en la Aduana a la espera de una autorización de la Secretaría de Comercio y se van liberando a cuentagotas”, se lamentó un alto ejecutivo consultado por el medio porteño. También añadió que el Gobierno argumenta que actualmente “hay mucho stock en el mercado y que por el momento no es necesario importar”.
En el sector aseguran que no existen faltantes notorios de productos, salvo casos puntuales. Aunque la situación podría cambiar en marzo con la vuelta de actividades.
Incluso consideran “lógica” la decisión oficial de administrar las compras al exterior para proteger las divisas. No obstante, destacan que cada actor del mercado afronta un escenario diferente. “Hay muchos importadores chicos con mercadería retenida, que compraron a crédito y que no pueden cumplir con los pedidos”, explicaron.
La idea de modificar el esquema arancelario estaba bastante difundida por toda la industria, pese a que desde el Gobierno desestimaron esa modificación. Varias fuentes del sector señalaron que la suba prevista no contemplaba la exigencia de ensamblar computadoras en el régimen promocional de Tierra del Fuego, sino en cualquier lugar del país. “Si se llega a concretar, no tenemos previsto hacerlo en el sur por los altos costos logísticos”, dijo un ejecutivo fueguino al tanto del asunto.
El renovado segmento de las PC en la Argentina es liderado por las marcas internacionales (Lenovo, HP, Dell, Acer y Asus), que concentran el 60% de las ventas totales. El 40% restante se lo reparten los sellos locales, como Banghó (PC Arts), Exo, Noblex y Compaq (grupo Newsan) y Positivo BGH, entre otros. En la industria creen que con el traslado a precios del impuesto se invertirán los porcentajes.
En 2020 se despacharon alrededor de 1,5 millones de unidades, lo que representa una suba de 50% con respecto al año anterior.