El Consejo Empresario Mendocino elaboró un informe que analiza la evolución de las exportaciones mendocinas entre 2010 y 2019, y muestra el efecto de la pandemia en las ventas al exterior durante el primer semestre de 2020. En comparación con el mismo período del año pasado, se registró una caída del 5% y las empresas que exportaron, que en 2019 fueron 741 se redujeron a 583.
El texto advierte que organismos internacionales prevén una caída del producto global del 4,9% en 2020, que tendría un impacto diferente en las economías avanzadas y las que se encuentran en desarrollo. Esta desaceleración global de la actividad económica, como consecuencia del Covid-19, ha causado una contracción del comercio internacional de bienes del 5% interanual en el primer trimestre de 2020.
Sin embargo, el estudio del CEM permite entender que el descenso en las exportaciones es previo a la pandemia. En 2019, las ventas mendocinas al exterior alcanzaron los 1.453 millones de dólares en 2019, un 4,7% menos que en 2018. Esto se explica por el aumento en los volúmenes físicos de los principales productos exportados, a la vez que la reducción en mayor proporción de sus precios promedios.
“Entre 2010 y 2019 las exportaciones locales disminuyeron un 14,3%, pudiéndose distinguir subperíodos: a) contracción de USD 395 millones entre 2010 y 2015 y, b) aumento de USD 152 millones entre 2015 y 2019. Punta a punta, las exportaciones no lograron ser un motor de crecimiento de la economía local”, señalan. Y añaden que las ventas mendocinas al exterior representaron el 2,2% del total de las de Argentina en 2019; por lo que la participación es menor a la del Producto Bruto Geográfico (PBG) en el Producto Interno Bruto (PIB).
Mendoza exportó 738 dólares por habitante en 2019 (la media de Argentina es de 1.454 dólares), por lo que se ubica en el puesto 12 entre las provincias argentinas. Sin embargo, los volúmenes físicos exportados de productos mendocinos vienen creciendo en los últimos dos años, luego de una caída entre 2012 y 2014 y del amesetamiento entre 2014 y 2017.
Además, hay un significativo aumento de las Manufacturas de Origen Agropecuario (55% a 68% de las exportaciones) en la última década, compensado por caídas en Productos Primarios y Combustibles y Energía, y en menor medida por las Manufacturas de Origen Industrial. Las exportaciones mendocinas se concentran en pocos productos: el 69% en apenas 5; el más importante es el vino fraccionado, con USD 650 millones en 2019 (45% de las exportaciones).
El documento del CEM plantea que el país “tiene un importante problema de competitividad, que no se resuelve con devaluaciones, múltiples tipos de cambio y cepos. Es necesario trabajar una agenda exportadora y de competitividad integral, que concrete más acuerdos de libre comercio, para mejorar las condiciones de acceso a terceros mercados, a la vez que reduzcan costos logísticos, laborales, financieros y tributarios que afectan a la producción y al empleo. Además, es necesario simplificar trámites para impulsar exportaciones y nuevas inversiones con destino a exportación”.
En tanto, considera que “Mendoza debe producir y exportar más. Para ello, es necesario que amplíe y diversifique su matriz productiva sumando la minería sustentable allí donde sea posible (por ejemplo, en Malargüe), que potencie el desarrollo de hidrocarburos no convencionales, y que ofrezca su calidad de vida y su polo educativo y de servicios para atraer y desarrollar el talento que nos permita constituirnos en un líder regional de la economía del conocimiento”.
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