En el marco de una política de expansión a nuevos países, Toyota podría comenzar a fabricar en Argentina una versión 100% eléctrica del modelo Hilux, la pick up mediana más vendida de la región. La noticia fue confirmada en Nikkei, uno de los diarios económicos más importantes de Japón.
“El mayor fabricante de automóviles del mundo planea aumentar la producción de vehículos eléctricos a aproximadamente un millón de vehículos para ese año, es decir, siete veces más que la producción de 2024. Toyota actualmente fabrica vehículos eléctricos solo en Japón y China. La expansión de la producción a EEUU, Tailandia y Argentina ayudará a protegerse de los riesgos cambiarios y arancelarios, y a agilizar la entrega de vehículos a los clientes. Toyota también planea comenzar a fabricar una Hilux eléctrica en Argentina”, indicaron en Nikkei.
Rápidamente, la publicación llegó a la sede de Toyota Argentina ubicada en Zárate. “No tenemos ningún comentario para hacer en relación a un artículo periodístico”, aseguraron desde la planta.
Planta de Toyota en Zárate
Planta de Toyota en Zárate.
El efecto de los aranceles aplicados por el presidente estadounidense Donald Trump sobre todas las importaciones a Estados Unidos, podría tener consecuencias similares a la de la crisis financiera mundial del año 2008, según consideran distintos analistas de la industria automotriz.
Algunas firmas europeas suspendieron la entrega de vehículos ya nacionalizados en EE.UU. Casos como los de Audi y Volvo, donde ambas compañías lo hacen para evitar tener que vender sus vehículos con un precio que puede aumentar entre USD 2.000 y USD 20.000.
La novedad difundida en Japón sobre la posible fabricación de una Toyota Hilux eléctrica parece tener algún hilo conductor con la realidad.
Según indicaron en Nikkei, “este esfuerzo por distribuir la producción se produce en un momento en que el comercio mundial se fragmenta bajo la presión de medidas como el arancel del 25 % impuesto por el presidente Donald Trump a las importaciones de vehículos a EEUU”.
El escenario no está muy alejado de esta idea. Toyota Argentina afirmó hace varios meses que planea fabricar una versión híbrida de Hilux. Parte de esa planificación consiste en la exploración de las factibilidades de un proyecto de esa magnitud, entre los que se encuentra la investigación de proveedores locales e internacionales.
En consonancia, el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) que puso en marcha el gobierno el año pasado, está dirigido a proyectos que estén relacionados con las nuevas tecnologías de propulsión en el caso de la industria automotriz.
Sólo una escala industrial muy significativa podría justificar un proyecto de gran magnitud. En este marco podría entrar en juego la posición geopolítica de Argentina alineada con la Casa Blanca.