La organización del Mundial Sub20 de la FIFA 2023 en Argentina tomó por sorpresa a todos, más si se tiene en cuenta que la rápida decisión que tomó Chiqui Tapia para traer el campeonato a nuestras tierras abrió la posibilidad de que la Selección pudiera disputar el torneo ya que había sido eliminada.
La alegría de ver de forma presencial la Copa llevó a que cada partido fuera una fiesta que bajaba de las tribunas y contagiaba a todos.
Desde un marco más económico, el certamen generó gran movimiento de turistas y divisas ya que fanáticos de todo el mundo decidieron venir a país para disfrutar de buen fútbol y de una cotización cambiaria más que tentadora.
En ese sentido, durante los 23 días que duró el Mundial viajaron a las principales sedes y sólo por el torneo, 414 mil visitantes, entre nacionales y extranjeros. Estos hinchas gastaron $93.713 millones en alojamiento, comida, transportes internos, compras y recreación, según un informe elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
A los turistas del exterior se sumaron 184 mil locales, que con el disparador del certamen juvenil aprovecharon a viajar para presenciar los partidos y hacer turismo.
Cada equipo llegó con una comitiva de coordinadores y asistentes, además de los familiares y amigos que los siguieron.